A. Alonso www.rtve.es 05/02/2010

La mayor superproducción del cine español, nominada a mejor película.

En Los otros era una mujer autoritaria y obsesionada con la religión que acababa descubriendo que el mundo en el que vivía se desmoronaba; en Mar adentro, un sacerdote parapléjico que se opone a los deseos de morir de Ramón Sampedro…

En Ágora, el «Spielberg español» va un paso más allá y hace de una superproducción -la mayor del cine español- que apuntaba a peplum, una película de grandes dimensiones con claro mensaje filosófico e ideológico.

«Siempre digo que mis películas tienen que tener qués. En ese sentido, Ágora es mi película más cargada de significado». Lo decía Alejandro Amenábar en un encuentro digital con los lectores de RTVE.es.

Y es que el director de Tesis es un cineasta de tesis que en Ágora recoge la ideas sobre la decadencia del Imperio Romano de Edward Gibbon y la Hipatia del Cosmos de Carl Sagan, para construir una historia de la lucha entre fe y razón sobre la leyenda de la científica atea, interpretada por Rachel Weisz, de la que no ha quedado ninguna obra.

Ágora se sitúa en la Alejandría dominada por las tensiones entre cristianos y judíos a finales del siglo IV. La película «cuenta el momento en el que -según Amenábar- los cristianos comienzan a ser perseguidores».

Con 50 millones de euros de presupuesto, un equipo técnico de altura (Dario Marianelli en la banda sonora, por ejemplo) y un reparto internacional, Amenábar se ha superado, conquistando la taquilla española en 2009 (fue la película española más vista). Nadie le puede negar al cineasta el valor para embarcarse en proyectos de riesgo.

VIDEOS:
Días de cine: ‘Ágora’, de Alejandro Amenábar, por Alberto Bermejo
Días de cine: Los rostros de Rachel Weisz, por Juan Carlos Rivas