EFE | Sevilla | 19/07/2010

Un relieve fálico de piedra ha sido hallado en uno de los muros exteriores del antiguo edificio romano del siglo I antes de Cristo situado en el patio de Banderas de Sevilla, dentro del conjunto del Real Alcázar sevillano, durante las excavaciones arqueológicas que se realizan en este céntrico espacio.

El equipo arqueológico que dirige Miguel Ángel Tabales ha hallado este bajorrelieve pétreo durante las tareas de limpieza previas a la tercera campaña de investigaciones arqueológicas. Trabajos encargados por el Patronato del Real Alcázar y la Casa Consistorial, según informó ayer el Ayuntamiento sevillano.

Se trata de una imagen fálica en bajorrelieve «con una clara justificación profiláctica y apotropaica», algo común en la época romana y muy especialmente a finales de la República, época a la que pertenece el antiguo edificio en el que se dispuso, destaca un comunicado del Ayuntamiento. El relieve muestra el pene sustentado por dos extremidades traseras en movimiento, que los responsables de la excavación creen que serían patas de bóvido, y cola de león, motivo con abundantes paralelos como los ejemplares localizados en el decumano de las antiguas ciudades romanas de Leptis Magna o Clunia.

Según los arqueólogos que trabajan en esta zona, su interés radica en su «significado como elemento arquitectónico que podría justificar una función para el edificio» que se está excavando, cuyos restos están superpuestos bajo el primitivo Alcázar sevillano. Este tipo de imagen aparece frecuentemente en edificios romanos, sobre todo públicos. En este caso la justificación parece ser la costumbre de atribuir al falo erecto poderes para combatir el mal de ojo y evitar a los malos espíritus.