Madrid | EFE www.elcorreo.com 10/06/2012

Demostrar la plena modernidad de los clásicos grecolatinos y acercarlos al lector del siglo XXI son los principales objetivos que la editorial Alianza se planteó al lanzar una nueva colección con títulos de Platón, Séneca, Ovidio, Jenofonte y Horacio, entre otros, prologados por autores modernos.

Esta colección fue presentada hoy por Alberto Manguel, Luis Antonio de Villena y Miguel Ángel Aguilar en el pabellón del Banco Sabadell de la Feria del Libro de Madrid, a una hora que competía con el partido de la selección española contra Italia y con la final de tenis de Roland Garros, pese a lo cual el salón se llenó.

Manguel ha prologado «La República», de Platón, y «Sobre el ocio», de Séneca; Villena presenta «Las odas», de Horacio, y Aguilar «La Anábasis», de Jenofonte.

Para Alberto Manguel, escritor argentino con ciudadanía canadiense, fue «una doble suerte» prologar a Platón y Séneca, porque «cada libro que leemos nos convierte en una persona distinta» y las obras de estos dos clásicos, como las de todos los demás, ayudan a cambiar. En presencia de la directora de Alianza, Valeria Ciompi, Manguel elogió el lanzamiento de esta colección, que demuestra «fe en el libro, algo raro hoy día».

El autor de «Una historia de la lectura» abogó por quitarle a la palabra «clásico» la connotación negativa que se le suele dar como «algo serio, aburrido y a gran distancia de nosotros; como algo que seguramente tiene valor, pero para académicos e investigadores…»

Pero «clásico» simplemente quiere decir «popular, algo que a través de muchas generaciones que los han leído y les han dado vida nueva, se ha decidido que vale la pena conservarlos».
Y son populares porque el nuevo lector que lee uno de esos libros «pone en palabras su propia experiencia».

Villena fue el que con más pasión habló hoy de los clásicos grecolatinos y de su modernidad. Este escritor pertenece a una generación que tuvo «la suerte de educarse con los clásicos» y de estudiar griego y latín. Desde muy pronto advirtió que la cultura grecolatina «representaba un estado de la cultura muy moderna».

Aquellos escritores reflejaban sus pensamientos «con una libertad» que no se ha vuelto a conocer casi hasta el siglo XX, señaló Villena, que estudió Lenguas Clásicas y le gustaban tanto que debería haber sido «profesor de latín», pero se hizo escritor.

Los clásicos grecolatinos, aseguró este poeta y narrador, «son divertidos porque hablan de valores similares a los nuestros, y hablan de pluralidad, de libertad, de ciudadanía». «La pluralidad que se da en el mundo clásico no se ha vuelto a dar hasta el siglo XX».

«Nunca hemos estado más cerca de los clásicos que ahora, pero los gobernantes los alejan del público y los eliminan de los planes de estudio», en los que ya casi no tienen presencia el latín y el griego.

Villena consideró «un idiota despilfarro» decir que los clásicos «pertenecen a unos cuantos eruditos. Nos pertenecen a todos porque es algo que está vivísimo, mucho más vivo que otros clásicos posteriores», como los cantares de gestas o el Poema de Mío Cid, opinó.

A Miguel Ángel Aguilar le «sorprendió» el encargo que le hizo Aguilar de acercar hasta el lector de hoy esa obra de Jenofonte. Su lectura le hizo ver «cómo los clásicos tienen esa virtud maravillosa que nos permite comprobar que, aunque cambien muchas cosas y se produzcan avances, hay algo inmutable: el ser humano, sus pasiones y sus maneras de entender la vida».

Si «La Anábasis» fuera un texto «obligatorio en el Pentágono» y en otros centros de decisión, «muchas de las torpezas que se han cometido recientemente en Irak y Afganistán no se habrían cometido», aseguraba Aguilar.

ENLACES: http://www.alianzaeditorial.es/minisites/clasicos/clasicos2.html

FUENTE: http://www.elcorreo.com/agencias/20120610/mas-actualidad/cultura/nueva-coleccion-acerca-clasicos-demuestra_201206102025.html