Ferran Gerhard | Tarragona www.elperiodico.com 03/03/2006
La muralla romana sufrió un derrumbe a causa de la lluvia.
El paseo Arqueològic de Tarragona, que limita con la muralla romana, se abre hoy después de que el 14 de noviembre del 2005 el desprendimiento de unos 20 metros de parte del muro obligara a cerrarlo para evitar accidentes.
También se han iniciado los estudios parar evaluar el estado en que se encuentran los 1.300 metros de muralla que quedan de la fortificación que comenzó a levantarse en el siglo III antes de Cristo. Esta radiografía permitirá redactar un plan integral de conservación del monumento, declarado en el 2000 Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. "Se trata de una investigación compleja que puede durar dos o tres años", dijo ayer Maria Mercè Martorell, edil de Patrimonio (PP). Está previsto elaborar un informe geotécnico mediante catas y sondeos electromagnéticos.
REFUERZO
La intervención, que ha costado 120.000 euros, ha consistido en colocar cuatro contrafuertes metálicos en el tramo que se desmoronó parcialmente por filtraciones de agua. Tras retirar los escombros se numerarán los sillares que saltaron y se examinará el relleno que separa los dos muros de la muralla, de 12 metros de altura, sobre los que discurre el paso de ronda.
