www.terra.es 25/12/2007

No. No vamos a hablar de la ‘oscarizada’ película protagonizada por Audrey Hepburn y Gregory Peck, ¡vamos a vivirla! Como el periodista truhán y la princesa rebelde, cogeremos nuestra vespa y nos perderemos por las históricas calles romanas para saborear la “Dolce Vita” de la Ciudad Eterna.

Roma, cuna de la civilización occidental. Un telón espectacular donde poder vivir la historia de mano de los emperadores Augusto y César, que dejaron un legado de belleza y valor incalculable; o de Miguel Ángel y Da Vinci, en un peregrinaje más artístico. Un lienzo que plasma más de 30 siglos de luchas, poder, secretos… que han quedado reflejados en sus calles, en sus plazas, en sus monumentos. Inestimables tesoros culturales grabados a fuego, testigos de lo que fue la capital del Imperio Romano.

Aunque, como dicen por estos lugares, para visitar esta fascinante ciudad “Non basta una vita”, vamos a intentarlo. Nos alquilamos una scooter, para no perder el tiempo en atascos y aglomeraciones, y nos lanzamos a descubrir todas las maravillas que encierra cada rincón de la ‘Ciudad Eterna’.

Paseando por la Roma Clásica
Roma es fascinante para el viajero, un lugar para perderse. Levantada sobre varias colinas, entre los meandros del Río Tiber y a unos 20 Km. del Mar Tirreno, esta ciudad emana historia. A cada paso es posible encontrar desde construcciones clásicas como el Coliseo hasta restos del primer período cristiano, iglesias románicas, palacios renacentistas, detalles barrocos… épocas hacinadas en unos pocos metros cuadrados, que se mantienen en pie con orgullo, con clase, con distinción. Por ello, en 1980 la UNESCO declaró el centro histórico de la ciudad, Patrimonio de la Humanidad.

La ciudad de Rómulo y Remo nos ha dejado un legado histórico difícil de superar, que nos ha posibilitado conocer un poco más cómo se estructuraba el Imperio Romano, la vida de los emperadores, de los gladiadores, su artesanía, sus costumbres… Un viaje histórico plasmado en construcciones impresionantes que han sobrevivido al paso del tiempo.

-Coliseo. Es el nombre popular con el que se conoce al Anfiteatro Flavio construido en el siglo I, la obra más grandiosa de la arquitectura romana y uno de los grandes atractivos turísticos de la ciudad donde se llevaban a cabo espectáculos como las “veneraciones” (peleas de animales), los “noxii” (ejecuciones de prisioneros por animales), así como las “munera”, peleas de gladiadores. Tenía cabida para 50.000 espectadores, lo que le convertía en el más grande de la Antigua Roma.
Curiosidades: desde el año 2000, el edificio se mantiene iluminado durante 48 horas cada vez que en algún lugar del mundo se conmuta o aplaza una sentencia de muerte a un condenado. Además, es unos de los 21 candidatos a ser una de las 7 nuevas Maravillas del Mundo.

-Forum Romano. Centro comercial, político y religioso de la antigua capital del Imperio. Situado junto al Coliseo, se extiende a lo largo y ancho del valle ubicado entre la colina del Palatino y del Capitolio. Como su construcción duró unos 900 años, se yuxtaponen edificaciones republicanas e imperiales. Entre los monumentos y ruinas que perduran, destacan los templos de Cástor y Pólux, de Júpiter o de Rómulo; la Basílica Emilia y Julia; el Arco de Septimio Severo o de Tito; o la Rostra, la tribuna desde donde los políticos daban sus discursos a los ciudadanos romanos.
Información: la entrada es gratuita y el horario, de 9 de la mañana al anochecer.

-Panteón. El Panteón de Agrippa, templo circular construido a comienzos del Imperio Romano y conocida popularmente como La Rotonda, está consagrado a las siete divinidades celestes de la mitología romana: el Sol, la Luna y cinco planetas (Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno). En la Edad Media fue donado al Papa Bonifacio IV que lo convirtió en un templo de culto cristiano.
Curiosidades: este templo es uno de los que menos ha sufrido los envites de los siglos y aparenta estar igual que en la época de los romanos.

-Termas de Caracalla. Construidas en el año 216 d.C., en el reinado de Marco Aurelio, servían como baños y zona de ocio para los ciudadanos romanos. Fue concebido con la grandiosidad de los spa de lujo actuales: grandes muros, jardines y una rica decoración (mármoles, metales preciosos, fuentes, mosaicos, esculturas…) distribuida en dos plantas superiores y dos subterráneas, con capacidad para unas 1.500 personas. Las salas disponían de aguas a distintas temperaturas: el Frigidarium, el Tepidarium y el Calidarium y se completaban con un gimnasio, un baño turco (laconicum) e incluso un biblioteca. Pero su vida fue muy breve ya que dejaron de funcionar en el año 537.
Información: cierran los lunes desde las 13 horas y la entrada cuesta 6 euros, válida también para visitar la Villa dei Quintili y el Mausoleo de Cecilia Metella.

Tour por las plazas más famosas
El romano tiene alma mediterránea. Le gusta disfrutar del sol, de la compañía de la gente, de los paseos… y esto se materializa en las numerosas plazas que siembran la ciudad. Lugares de encuentro donde habita el bullicio y se plasma la “dolce vita”.

-Plaza de España. Escenario de la famosa escalinata, que sube a la iglesia Trinità dei Monti, de la “Barcaccia”, una de las fuentes más célebres de Roma y de la columna de la Inmaculada Concepción.
Curiosidades: la gran escalera está decorada con numerosas terrazas-jardín, que son adornadas en primavera y verano con diversas variedades florales.

-Plaza del Capitolio. Una inmensa escalera inclinada (la Cordonata) sirve de acceso a esta magnífica plaza que Miguel Ángel diseñó para coronar el Capitolio, la más pequeña de las siete colinas de la Roma Antigua, pero la más importante puesto que desde aquí se divisaba y controlaba todo el imperio Romano. Tres edificios forman el telón de la historia romana: el Palazzo Senatorio, el Palazzo dei Conservatori y el Palazzo Nuovo. Todo se conserva tal y como fue concebido, excepto la estatua de Marco Aurelio que es una copia, conservándose el original en los Museos Capitolinos.
Curiosidades: siglos después, el Congreso de los Estados Unidos tomaría el nombre «The Capitol».

-Plaza Navona. De estilo barroco, conserva la forma oblonga del antiguo circo de Domiciano (siglo I d.C.). Destaca la célebre fuente de los Cuatro Ríos de Bernini y la iglesia de Sant’Agnese en Anone.
Curiosidades: se dice que en tiempos romanos se llenaba de agua para simular batallas navales.

-Plaza Venecia. El monumento más grande del país se encuentra aquí, en la Plaza Venecia, y representa a Víctor Manuel II en conmemoración de la independencia de Italia.
Curiosidades: desde aquí se inicia la vía del Corso, arteria que da acceso a los monumentos más representativos de la ciudad capitolina y comunica con la Plaza del Pueblo, donde destaca un obelisco construido en los tiempos de Ramsés II y trasladado a Roma bajo el imperio de Augusto.

El Vaticano, un Estado dentro de la ciudad
La cúpula de San Pedro sobresale majestuosa en el horizonte de la ciudad anunciando un minúsculo estado independiente enclavado en la ciudad de Roma, el Vaticano, donde el Papa es el jefe de gobierno bajo la forma de monarquía teocrática. Situado en la orilla derecha del río Tíber y en su escaso medio kilómetro cuadro de superficie, con menos de 1.000 habitantes, alberga la Santa Sede, centro de poder religioso y máxima institución de gobierno de la Iglesia Católica Apostólica Romana.

El edificio más destacado es la Basílica de San Pedro, el más importante dentro de la religión católica tanto por lo que representa como por su volumen (193 m de longitud y 44,5 m de altura). Aunque no es la catedral de Roma, este honor lo ostenta la archibasílica de San Juan de Letrán, es más conocida que ésta al ser la iglesia del Sumo Pontífice, lugar donde se celebran las ceremonias litúrgicas más importantes y donde se encuentran enterrados todos los Santos Padres, desde San Pedro hasta Juan Pablo II.

La Basílica proyecta su sombra en la inmensa plaza ovalada de San Pedro. Está rodeada por una columnata balaustrada sobre la que se asientan las figuras de 140 santos y un monumental obelisco de 25 metros de altura. En esta plaza se suelen concentrar los fieles para participar en las solemnes liturgias o audiencias públicas departidas por el Papa.

Mención especial requiere la Capilla Sixtina, situada a la derecha de la Basílica de San Pedro, y uno de los más famosos tesoros artísticos del mundo. Es conocida por ser la sala donde se realizan las coronaciones papeles, los cónclaves y otras ceremonias oficiales, por sus frescos y por su bóveda.

Otros lugares interesantes que visitar en este minúsculo país son, además de la catedral de Roma, la Basílica de San Pablo Extramuros y la Basílica de Santa María la Mayor, el Palacio de Castelgandolfo (residencia veraniega del Papa) y los Museos Vaticanos entre los que se encuentran el Museo Gregoriano de arte egipcio y de arte etrusco, el Museo Pío Clementino, el museo Chiaramonti y la Pinacoteca Vaticana.

Curiosidades: la Basílica de San Pedro ocupa el 7% de la superficie del país. Si la medimos junto con la Plaza de San Pedro, la extensión se amplía a un 20% del territorio.

«Donde fueres, haz lo que vieres»
Siguiendo las recomendaciones de este proverbio clásico, vamos a hacer un recorrido por las costumbres en las que todo viajero debe participar en Roma.

-La boca de la verdad. Este medallón gigante, que representa una deidad marina con barba y cuernos, se encuentra en la iglesia Santa María in Cosmedin. Según cuenta la leyenda, la boca se cierra y devora la mano del mentiroso.

-Fontana de Trevi. A raíz de la película “Tres monedas en la fuente”, surge una leyenda urbana según la cual trae suerte arrojar tres monedas con la mano derecha sobre el hombro izquierdo en esta fuente: una para asegurar el regreso a Roma, otra para encontrar el amor y la última para casarse con él. Pero desde ahora este dinero hará realidad los sueños de muchas más personas porque se utilizará para dar vida a un supermercado gratuito, llamado «Emporio Cáritas» para familias pobres.

-Los «candados del amor». En el puente Milvio de Roma las parejas de enamorados colocan en las farolas candados con sus iniciales como símbolo de amor, para después tirar la llave al río Tévere. Esto surgió a partir del libro de Federico Moccia «Ho voglia di te» (“Tengo ganas de ti”) que se llevó a la gran pantalla en 2006.

-Visitar Roma en Scooter. El tráfico endiablado de la capital italiana ha vuelto a poner de moda este modo de desplazarse. Un modo muy eficaz de ahorrar tiempo y aglomeraciones, además de retomar una tradición ‘ciencuentera’ cuando media Roma andaba motorizada, situación que fue inmortalizada en numerosas películas, como en “Vacaciones en Roma”.

Nuestros Top: dónde comer, dormir e ir de compras

Comer
-Camponeschi. Pescado y cocina romana en la Piazza Farnese. Ambiente romántico. 50a Piazza Farnese.
-Cafe della Pace. Situado a unas manzanas de la Piazza Navona, es muy popular entre los locales por sus postres y sus capuccinos. Via della Pace 3.
-Basilica Ristorante Taberna VLPIA. Lo destacamos por estar ubicado en pleno Foro Romano. Foro Traiano, 1b/2.
-La Montecarlo. Situada muy cerca de la Piazza Navona, es una de las mejores pizzerías de Roma. 13 Vicolo Savelli, Rome, 186.

Dormir
-Raphael Hotel. A unos pasos de la Piazza Navona se encuentra este hotel con su fachada cubierta de hiedra, sus cerámicas de Picasso y sus antigüedades que convierten el vestíbulo en un auténtico museo. Largo Febo, 2. Desde 200 € habitación.
-Marriott Grand Hotel Flora. Alojamiento de primera clase superior de estilo tradicional. Via Vittorio Veneto, 191. De 207.10 € a 263.38 €, por habitación estándar y noche.
-Grand Hotel de La Minerve. Está situado en un magnífico edificio del siglo XVII, a pocos pasos del Panteón, Piazza Navona, Fuente de Trevi y Plaza España. Destacar el «Winter-Garden», un elegante lobby dominado por una original estatua de Minerva y una hermosa terraza donde gozar de una vista magnífica de la ciudad Eterna. Piazza della Minerva, 69. Desde 290 €.
-Farnese Hotel. Ubicado entre la ciudad del Vaticano y el histórico centro de Roma, en el exclusivo vecindario de Prati. Via Alessandro Farnese 30. Precio indicativo por habitación doble y noche 200 €.

Ir de compras
-Ropa y calzado de marca: en los alrededores de Plaza de España, Via Veneto, Via Condotti, Via Frattina y Via Borgogna.
-Ropa para presupuestos más ajustados, alternativa o de segunda mano: las tiendas en la vía Tritone, las calles cercanas a Fontana di Trevi y Via Nazionale y la Via del Governo Vecchio.
-Antigüedades: en Via Coronari, Babbuino y Marguta.
-Libros: alrededor de la plaza Navona.