La Londos School of Economics lidera una iniciativa para fomentar las Humanidades.

[La Londos School of Economics lidera una iniciativa para fomentar las Humanidades. ALICE DIETRICH (UNSPLASH)]

Carmen Riestra Puga  elpais.com  24/09/2020

El valor de esta disciplina en el currículo formativo es necesario no solo para rehumanizar la educación, sino también para potenciar las competencias para construir un planeta sostenible

Materias como Historia, Literatura, Geografía, Lengua, Cultura Clásica, Ética, Filosofía, Lengua Extranjera y las ya predecibles marías del currículo, Plástica y Música, son las asignaturas de corte humanista que en los últimos tiempos han ido perdiendo popularidad y estatus en cuanto al valor que atribuimos socialmente a las disciplinas que nos preparan para acceder al mercado laboral. Es decir, su valoración va ligada a su potencial en términos productivos. Una excepción son los idiomas que, si bien pertenecen a esta categoría, son valoradas positivamente y percibidas como conocimientos clave para la formación, ya que facilitan nuestra incorporación a un mercado de trabajo altamente competitivo.

En este contexto, hay una campaña que actualmente está en marcha en el Reino Unido que busca precisamente poner en valor estas asignaturas de corte humanista. Se trata de una iniciativa liderada por la London School of Economics que busca incentivar a los estudiantes a cursar este tipo de disciplinas académicas. A través de un ingenioso branding, han acuñado el término SHAPE —Social Science, Humanities and the Arts for People and the Economy (ciencias sociales, humanidades y arte para las personas y para la economía)— para designar este compendio de materias que viene arrastrando una baja popularidad entre los estudiantes.

Me parece interesante destacar cómo se integra a través del acrónimo SHAPE la noción de que son necesarias para la rehumanización de la sociedad, tanto social como económica. Para quien no se haya dado cuenta, la economía necesita de las Humanidades. Necesita rehumanizarse, necesita empatía, necesita aprender a colaborar. Co-laborar, trabajar juntos para regenerar el sistema porque el actual es insaciable y no es sostenible. Necesitamos dar paso a un capitalismo sostenible y colaborativo, en definitiva, más humano. El planeta lo está pidiendo a gritos.

¿Y por qué las humanidades son importantes en nuestra formación? Porque este tipo de materias facilita el desarrollo del razonamiento verbal, la comprensión de la sociedad, del medio ambiente y de la cultura, y que están peligrosamente infravaloradas y tachadas de materias blandas o poco importantes. Y esto es perjudicial para la formación de los jóvenes.

Formación holística para comprender el entorno

Para formarnos y desarrollarnos necesitamos una formación holística que nos permita no sólo conocer el mundo que nos rodea sino conocer a los demás y autoconocernos. Esto es a lo que la educación reglada debería de aspirar. Este tipo de materias nos permiten precisamente desarrollar habilidades, métodos y formas de expresión para comprender de una manera más profunda lo que sucede a nuestro alrededor a través de la observación, la reflexión y el análisis. La literatura, la historia, la geografía, el arte y los idiomas incentivan nuestra curiosidad y favorecen el desarrollo de la empatía. Este tipo de materias, como nos recuerda la campaña de la London School of Economics, “nos capacitan para analizar, interpretar, crear, comunicar y colaborar con rigor, claridad y energía”. Estas son sin duda habilidades cruciales hoy en día para la rehumanización del futuro.

La motivación por otro lado es uno de los aspectos clave para que el aprendizaje suceda, el gran talón de Aquiles de nuestro sistema. Invito a cualquier persona mínimamente interesada en cuestiones educativas a escuchar al youtuber Jaime Altozano explicando su frustración con el sistema educativo. Creo que es altamente clarificador. La enseñanza basada en la repetición y en la memorización es un ejercicio vacío, desmotivador y la herramienta perfecta para conseguir generar rechazo por la cultura y el conocimiento. La literatura se aprende leyendo, no memorizando autores y fechas, y la historia y la filosofía no se pueden dictar, para eso ya están los libros.

FUENTE: elpais.com