Roma | ANSA 16/12/2009

La Superintendencia de Roma no confirma la hipótesis de que los restos descubiertos en Piazza Vittorio sean una parte de la villa en el Esquilino que perteneció al emperador Calígula.

Rosanna Frigeri, directora del Museo delle Terme y jefe de la zona arqueológica que incluye el Esquilino, señala que los restos son claramente identificables como ambientes que formaron parte de los llamados Horti Lamiani, fundados por el cónsul romano Elio Lamia (3 d.C.), pero que no hay certeza de que se trate de la casa de Calígula.

La misma prudencia muestra el superintendente arqueológico de Roma, Angelo Bottini, que considera “arriesgado” decir que los restos que se excavan en la Piazza Vittorio sean los de una villa de Calígula. “La parte más interesante del sitio – indica Frigeri – es la que vamos a excavar, un gran ambiente que se conocía antes, pero decir que esta es la villa del emperador Calígula es cuanto menos prematuro”.

El descubrimiento fue realizado durante los trabajos en la construcción de un edificio que prevé, entre otras cosas, 6 plantas de aparcamiento subterráneo. Las investigaciones arqueológicas han permitido descubrir una gran sala de uso público originalmente pavimentado con losas de mármol, luego extraídas, y algunas áreas de servicio, una de ellas pavimentada con mosaicos. También ha sido hallado un tramo de vía pavimentada conectada con la antigua vía Labicana, así como una entrada monumental, marcada por una escalera de mármol en el centro de dos largos muros.

En el curso de las excavaciones han salido a la luz revestimientos de mármol, joyas de oro, piedras preciosas e interesantes ornamentos pertenecientes al mobiliario de la villa. En especial capiteles de mármol y piedra, algunos idénticos a otros atribuidos a un fastuoso corredor descubierto debajo de la Via Emanuele Filiberto y ahora expuestos en los Museos Capitolinos.