www.hola.com 14/02/2011
Presidiendo las ruinas romanas de esta ciudad de Argelia se erige una columna en honor al escritor que dijo de ella que aquí se entiende el significado de la gloria. Amante y amada, es un alma vieja que hoy sigue siendo un reclamo para los dioses, los que nunca han dejado de soñarla.
La vida discurre despacito, sin apenas prisa, en esta orilla del Mediterráneo. Las ruinas romanas hablan de glorias pasadas, pero el enclave y sus costas prefieren disfrutar del apacible día a día, mientras esta ciudad adorada por Camus continúa manteniendo su estampa artesanal y centenaria, casi olvidada en otros puertos del litoral.
Tipaza conserva su nombre desde hace diecinueve siglos y eso se nota en la idiosincrasia de su gente; amable y hospitalaria, acostumbrada al trasiego de visitantes. Situada a unos 70 kilómetros al oeste de Argel, la antigua ciudad romana, ahora en ruinas, se extiende suavemente hasta el Mediterráneo y muestra un gran teatro, un anfiteatro, varias termas, una basílica, villas y foros, fuentes, ninfas y avenidas. Un verdadero museo de historia romana al aire libre.
Conserva otro célebre monumento, la Tumba de la Cristiana o Mausoleo Real de Mauritana, un curioso edificio circular de piedra de colosales dimensiones, que alberga el seplucro de la hija de Cleopatra y Marco Antonio.
Recorrer este maravilloso conjunto de ruinas fenicias, romanas, paleocristianas y bizantinas declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco es una forma excelente de conocer un poco más la intensa relación entre el Norte de África y los países mediterráneos.
La ciudad moderna de Tipaza se fundó en 1857 y su costa es un poderoso reclamo para los amantes de las playas paradisíacas. A lo largo de muchos kilómetros, el litoral ofrece arena blanca y aguas cristalinas. La jet set de Argel se pasea por sus clubs privados –como el Club de los Pinos y el Moretti- y el baño resulta cuanto menos curioso, ya que las mujeres no pueden hacerlo en bikini. Pese a todo, el ambiente animado y bullicioso contagia el ánimo y siempre es un placer disfrutar de un recién capturado plato de pescado o fumar una pipa de agua mientras el sol languidece en el horizonte.
GUIA PRÁCTICA
Cómo llegar
Las compañías Iberia y Air Algerie ofrecen vuelos directos a Argel desde Madrid.
Cómo moverse
Casi todos los hoteles de Argel ofrecen excursiones a Tipaza, a 70 kilómetros de la capital. Otra opción es alojarse directamente en alguno de los hoteles de la costa, aunque hay que tener en cuenta que la influencia del Islam todavía puede hacer incómodo un viaje sin organizar.
Dónde dormir
En Argel, el Sheraton Club des Pins Resort and Towers, el primer complejo vacacional de cinco estrellas de la capital está rodeado de vegetación y disfruta de excelentes vistas al mar. Cuenta con piscina y varios restaurantes argelinos e internacionales. En Tipaza, el Hotel de la Baie (Tel. 00 213 02 44 61 822), cuya ubicación, muy cerca de las ruinas, lo hacen perfecto para los que busquen playa, tranquilidad y algo de la magia de los primeros viajeros.
Dónde comer
En general, los restaurantes que se concentran en el puerto de Tipaza son sencillos y casi todos están especializados en pescado. Si se prefiere algo más sofisticado hay que acercarse hasta Argel y visitar Djanina (Tel 00 213 21 74 24 47), que guarda en su libro de honor la firma de los Reyes de España; Le Cèdre (Tel. 00 213 21 23 12 83), donde probar sus exquisitas especialidades francesas con un toque argelino; los pescados y mariscos en el elegante Grill Room (Tel. 00 213 21 66 92 75) o la cocina tradicional de Au en Bon Gibier (Tel. 00 213 21 66 29 80).
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La Casbah de Argel, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, testigo de algunos de los episodios más brillantes de la historia de la capital argelina. Construida en el siglo XVI, todavía conserva su sabor medieval, con sus mezquitas, palacios otomanos y callejones estrechos repletos de casas encaladas y, cómo no, también de tiendas y pequeños cafés.
Más información:
Embajada de Argelia en Madrid y Turismo de Argelia