De hecho, Márquez se mostró sorprendido por el ritmo de ventas que está manteniendo el primer espectáculo, la obra de teatro "Yo, Claudio", de Robert Graves, que supondrá el estreno mundial en los escenarios de la mítica serie de la BBC, una adaptación realizada especialmente para el Festival por José Luis Alonso de Santos, y que cuenta con Héctor Alterio en el papel protagonista.

De este espectáculo se han programado un total de 8 representaciones, los días 1 al 4 y del 8 al 11 de julio, de las que Márquez se mostró confiado en que, al ritmo de venta de entradas, se logren al menos cuatro llenos absolutos.

El director del Festival de Mérida, señaló en una entrevista concedida a Europa Press que este título ha generado "un interés inusitado como el de ningún otro, probablemente por las referencias a la serie de la BBC, que hizo mella en su tiempo", pero también por la presencia de actores como Héctor Alterio, Encarna Paso o José Carlos Plaza, según dijo.

De otro lado, dijo que a quince días del primer estreno "las cosas van muy bien, incluso sospechosamente bien", y añadió que en otras ocasiones "a estas alturas debería haber más problemas".

Y todo ello teniendo en cuenta que este año se celebra la 50 edición del Festival de Mérida, una efemérides sobre la que Márquez no vé ningún motivo para que sea considera como excepcional.

Sin embargo, sí se han preparado algunas actividades paralelas para celebrar el cumpleaños del certamen, como son la organización de una exposición y la publicación de un libro que recogen la historia del festival a lo largo de las 50 ediciones celebradas desde que Margarita Xirgú se convirtiera en la fundadora de este evento al representar en 1933 en el teatro romano de Mérida una versión de Medea creada por Miguel de Unamuno.

Ambas actividades paralelas al Festival, que se presentarán el próximo día 28 de junio, tienen para Jorge Márquez "una enorme trascendencia, pero no por la celebración de las 50 ediciones en sí misma, sino porque bajo el pretexto de la celebración hemos conseguido, por fin, hacer un archivo histórico del Festival de Mérida, que era algo tenía que haberse hace mucho tiempo".

El libro es el resultado de un exhaustivo trabajo de recopilación elaborado por un equipo dirigido por José Monleón, quien también fuera en su día director del Festival.

La exposición es un compendio de objetos recopilados que mantienen una relación con la historia del Festival, como carteles, folletos de programación o entradas, y se ha conseguido gracias a la colaboración de antiguos espectadores, así como de instituciones como la Asamblea de Extremadura, o el Museo Nacional de Arte Romano, ambos lugares donde quedará establecida.

Márquez tiene la intención de que la muestra se convierta en una exposición permanente. En su opinión "hay exposiciones que tienen que girar, pero hay otras como esta que están muy vinculadas al propio espacio". "Igual que no tiene mucho sentido crear una producción y exhibirla fuera, pues tampoco tiene mucho sentido que gire la exposición, porque hay que venir a verla en su entorno, en su ambiente natural", dijo.