Roma | ANSA 09/01/2009

Cuatro casas (insulae) de Ostia Antigua, extensión asomada al mar Tirreno de la Roma de época imperial, fueron abiertas al público tras nueve años de larga restauración.

Se trata de cuatro casas (hoy manzanas) del período en el que imperó Adriano (siglo II de la era cristiana), de propiedad de una clase media acaudalada y construídas con criterios urbanistas de vanguardia.

La novedad consiste en que todas estas casas están construídas en torno a un patio interno (en un principio se creyó que era un jardín) donde existían seis fuentes de agua para cada una de las familias habitantes del edificio.

Son casas bautizadas por los arqueólogos en base al nombre de sus propietarios, como la de Lucheia Primitiva, o de sus características decorativas como la de las Paredes Amarillas, de las Musas y del Techo Pintado y que conservan el más importante ciclo de pinturas romanas postpompeyanas existente en el mundo.

Por ejemplo, la casa de Lucheia Primitiva está decorada con frescos de figuras de sacerdotisas (este era el primer nombre que se la había dado al edificio) mientras la Casa de las Paredes Amarillas tiene, como su nombre lo indica, una predominancia de pinturas de este color.

La de las Musas, en cambio, ostenta frescos de época adrianea con el dios Apolo rodeado de sus nueve musas, que llevan una pluma en la cabeza como premio por haber ganado un concurso de canto a las Sirenas.