Tarragona | EFE 20/09/2011
Las obras han durado casi tres años y han costado dos millones de euros. Permiten caminar por donde circulaba el agua.
El acueducto conocido como el Pont del Diable, en Tarragona, se ha reabierto este martes tras una rehabilitación que ha durado casi tres años, con un coste de dos millones de euros, y el público ha podido circular por donde hace siglos discurrían las aguas que abastecían a la «Tarraco» romana.
El delegado del Gobierno en Catalunya, Joan Rangel, acompañado por el alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros, y el subdelegado del Gobierno en Tarragona, Ramon Inglés, han inaugurado hoy la rehabilitación del acueducto, en las que el ejecutivo central ha invertido 1,5 millones a cargo del programa del uno por ciento cultural, dedicado a recuperar el patrimonio histórico.
El ayuntamiento de Tarragona ha aportado el 25% restante del presupuesto, unos 500.000 euros, para restaurar este acueducto romano del siglo I a.dC situado en las afueras de la ciudad. Hasta el siglo XVIII, el acueducto sirvió para abastecer a la ciudad de Tarraco con agua del río Francolí.
Las obras realizadas incluyen la restauración de la cornisa superior y el recrecimiento del muro superior de este monumento, el único acueducto romano en Catalunya que se puede cruzar a pie.