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El
Museo
Arqueológico
de
Sagunt
volverá
a
ser
realidad
en
octubre
de
este
mismo
año,
una
vez
concluyan
las
obras
de
rehabilitación
que
se
están
realizando
en
la
Casa
del
Mestre
Peña
de
la
capital
del
Camp
de
Morvedre.
Quince
años
habrán
transcurrido
de
espera
y
casi
nueve
años
de
proyectos,
negociaciones
y
cambios
de
planes
en
torno
a
un
centro
que
debía
completar
en
su
día
el
proyecto
de
revitalización
del
complejo
monumental
de
Sagunt
en
torno
a
tres
ejes
discursivos:
la
recuperación
del
teatro
romano
como
espacio
cultural,
el
castillo
de
Sagunt
como
área
monumental
y
el
propio
museo
como
espacio
expositivo
didáctico
en
torno
a
la
romanización.
Ayer,
la
secretaria
autonómica
de
Cultura,
Concha
Gómez,
anunciaba
la
apertura
del
museo
para
el
9
de
octubre
tras
una
inversión
de
más
de
800.000
euros
para
la
rehabilitación
del
inmueble
y
de
400.000
euros
para
el
proyecto
museográfico.
El
museo
constará
de
dos
plantas
con
una
exposición
permanente
en
la
planta
baja
en
torno
a
la
época
romana
e
íbero
romana.
Y
con
una
segunda
planta
dedicada
a
exposiciones
temporales.
El
museo
arqueológico
de
Sagunt,
instalado
inicialmente
junto
al
propio
teatro
romano,
cerraba
sus
puertas
en
1990
tras
hundirse
el
techo
a
causa
de
unas
fuertes
lluvias.
Una
vez
aprobado
el
proyecto
de
rehabilitación
del
teatro
romano,
la
idea
inicial
fue
dedicar
el
área
situada
en
la
parte
trasera
de
la
escena
como
sede
del
museo.
Sin
embargo,
el
recurso
presentado
por
el
abogado
Juan
Marco
Molines
contra
la
rehabilitación
truncó
la
iniciativa
al
decretar
el
Tribunal
Superior
de
Justicia
de
la
Comunidad
Valenciana
la
paralización
de
las
obras
en
el
monumento.
Esta
paralización
continúa
vigente
hasta
que
se
resuelve
definitivamente
el
litigio.
Finalmente,
Cultura
optó
por
trasladar
el
proyecto
y
por
destinar
la
Casa
del
Mestre
Peña,
un
edificio
histórico
ubicado
en
el
mismo
centro
de
la
población,
como
sede
del
nuevo
museo.
Así
hasta
hoy.
Mientras
tanto,
las
colecciones
han
permanecido
almacenadas
y
sólo
se
exhibe
una
parte
de
la
misma,
la
referida
a
los
fondos
epigráficos.
Gómez
también
situaba
ayer
en
el
horizonte
de
enero
de
2006
la
inauguración
del
segundo
museo
de
la
imprenta
más
importante
de
Europa
después
del
de
Maguncia,
que
estará
ubicado
en
el
Monasterio
de
Santa
María
del
Puig,
después
del
acuerdo
alcanzado
por
la
Generalitat
para
el
alquiler
del
monasterio
durante
50
años.
Este
museo
de
la
imprenta
y
la
obra
gráfica
se
basará
en
la
colección
alojada
allí
a
la
que
se
van
a
incorporar
numerosos
elementos
de
ese
ámbito
adquiridos
por
la
Generalitat
sobre
imprentas
valencianas
tradicionales.
La
importancia
de
este
museo
radica
en
la
importancia
de
Valencia
como
ciudad
de
entrada
de
la
imprenta
en
nuestro
país.
Por
otra
parte,
y
tal
como
anunció
en
su
día
este
diario
hace
unas
semanas,
también
está
previsto
acondicionar
en
un
futuro
la
sala
Ferreres
del
Museo
del
Carmen,
con
una
inversión
entono
a
los
240.000
euros,
con
lo
que
se
aumenta
el
espacio
expositivo
actual
del
Carmen
en
más
del
50%.
Este
espacio
iniciará
sus
obras,
una
vez
concluida
la
Bienal.
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