De
confirmarse
la
hipóteis
de
que
cerca
de
la
ciudad
de
Melník,
al
norte
de
Praga,
las
legiones
romanas
habían
instalado
un
campamento
militar,
será
posible
dar
una
respuesta
afirmativa
a
esta
pregunta.
Al
tenderse
tuberías
de
agua
en
el
pueblo
de Vlineves,
en
las
cercanías
de
la
ciudad
de
Melník,
aparecieron
dos
fosos
que
llamaron
la
atención
de
los
arqueólogos.
En
uno
de
ellos
los
científicos
hallaron
cerámica
del
siglo
séptimo
antes
de
nuestra
era.
Este
hallazgo
no
sorprendió
a
los
especialistas
ya
que
el
lugar,
en
una
posición
aventajada
en
la
fértil
orilla
del
Elba,
fue
a lo
largo
de
la
historia
asentamiento
de
sucesivas
olas
de
pobladores.
Los
arqueólogos
encontraron
también
un
foso
que
recuerda
las
zanjas
con
las
cuales
los
romanos
fortificaban
sus
campamentos
militares.
Y
eso
sí
que
fue
una
sorpresa,
y
magna.
Y es
que
hasta
el
presente
se
pensaba
que
los
romanos
no
habían
llegado
hasta
Bohemia.
Restos
de
campamentos
romanos
fueron
hallados
sólo
en
Moravia,
parte
oriental
de
la
República
Checa.
Los
arqueólogos
descubrieron
también
restos
de
una
choza
celta
del
primero
o
segundo
siglo
antes
de
nuestra
era
que
habían
sido
dañados
por
la
construcción
del
foso.
Los
construtores
de
la
zanja
realizaron
por
lo
tanto
su
labor
después
de
los
celtas.
Ello
reforzó
la
hipótesis
de
que
se
trataría
de
un
campamento
militar
romano.
Dicha
hipótesis
está
respaldada,
además,
por
la
ubicación
del
foso.
Los
romanos
instalaban
sus
campamentos
precisamente
en
suaves
elevaciones
a
orillas
de
los
cursos
fluviales.
Las
fuentes
históricas
dicen
lo
siguiente
sobre
la
eventual
presencia
de
las
legiones
romanas
en
Bohemia:
Es
posible
que
hacia
el
año
seis
de
nuestra
era
el
emperador
romano
Augusto
decidiese
que
urgía
imponer
orden
en
Europa
Central.
Le
molestaba
el
expansionismo
del
príncipe
germano
Marobudo
que
dominaba
el
territorio
de
la
actual
Bohemia
y
empezaba
a
ser
peligroso
para
el
imperio
romano
cuyas
fronteras
setentrionales
coincidían
con
el
curso
del
Danubio.
El
ejército
de
Marobudo
era
imponente
para
aquellos
tiempos
ya
que
contaba
con
80
mil
soldados.
Se
supone
que
los
romanos
avanzaran
en
dos
direcciones
contra
el
reino
de
Marobudo
en
Bohemia:
La
mitad
de
las
tropas
romanas,
encabezada
por
el
futuro
emperador
Tiberio,
debía
atacar
desde
el
sur,
procedente
de
Carnuntum,
un
campamento
situado
cerca
del
Danubio.
Y la
segunda
parte
del
ejército
romano
habría
avanzado
hacia
Bohemia
desde
Maguncia,
en
Occidente.
El
plan
original
preveía
que
ambos
grupos
se
encontraran
en
el
territorio
de
Marobudo,
donde
lo
derrotarían.
Sin
embargo,
el
plan
no
pudo
realizarse.
En
Panonia,
la
actual
Hungría,
estalló
un
levantamiento,
y el
emperador
Augusto
tuvo
que
reconsiderar
sus
prioridades.
Puso
fin
a la
campaña
contra
Marobudo
y
mandó
al
ejército
aplastar
el
levantamiento.
Pero
no
queda
descartado
que
a un
contingente
romano
no
le
llegase
a
tiempo
la
orden
sobre
la
cancelación
de
la
campaña
y
los
soldados
avanzaran
hacia
el
centro
de
Bohemia.
El
hallazgo
de
las
posibles
huellas
de
un
campamento
romano
cerca
de
la
ciudad
de
Melník,
al
norte
de
Praga,
respalda
esta
hipótesis.
El
lugar
parece
propicio
para
un
encuentro
de
tropas
en
un
terreno
desconocido.
Como
puntos
de
orientación
podrían
servir
la
cercana
confluencia
de
los
ríos
Vltava
y
Elba
y la
colina
de
Ríp.
Para
confirmar
si
efectivamente
el
foso
descubierto
cerca
de
Melník
fue
abierto
por
los
romanos,
los
arqueólogos
checos
se
dirigieron
al
profesor
Günter
Wagner
del
Instituto
Max
Planck,
de
Heidelberg.
El
científico
alemán
recogió
una
muestra
de
la
tierra
del
supuesto
foso
romano
y la
analizará
con
ayuda
de
la
llamada
luminiscencia
óptica.
Este
método
permite
establecer
cuándo
la
tierra
fue
removida. |