Rómulo
y
Remo
fundaron
la
que
llegó
a
ser
la
capital
del
imperio
más
grande
de
Europa,
Roma.
Pasear
por
Roma
es
dar
un
paseo
por
la
historia
del
arte,
disfrutando
de
cada
uno
de
los
momentos
cruciales
de
la
historia.
No
se
le
puede
negar
su
papel
como
cuna
de
la
civilización
occidental
pero
Roma
es
hoy,
mucho
más.
Dentro
de
ella
está
el
mayor
poder
religioso
que
ha
existido
nunca,
el
Vaticano,
un
pequeño
estado
independiente
que
deja
maravillado
a
todo
aquel
que
cruza
su
puerta.
Existen
al
menos
tres
leyendas
que
hablan
sobre
la
fundación
de
la
ciudad
mítica,
lo
que
si
es
cierto
es
que
su
origen
está
emparentado
con
los
etruscos,
unos
ocho
siglos
a.C.
De
aquella
época
se
han
encontrado
restos
arqueológicos
como
las
tumbas.
Es
una
ciudad
para
disfrutar
despacio,
apreciando
cada
uno
de
los
detalles
y
además,
ha
de
hacerse
andando.
Museos,
galerías
de
arte,
iglesias
como
San
Pedro,
plazas,
palacios,
monumentos,
jardines,
etc.
Ciudad
única
en
el
mundo
que
no
defrauda
al
viajero,
pues
lo
tiene
todo.
A la
hora
del
descanso,
disfrutar
de
la
gastronomía
italiana,
de
un
helado
artesano
o de
un
café
se
convierten
en
toda
una
experiencia.
De
la
época
romana
es
imprescindible
la
visita
a
los
Foros,
el
Coliseo,
el
Pantenón,
etc.
No
menos
interesantes
son
los
restos
paleocristianos
y
medievales
sin
olvidar
la
impresionante
fiebre
de
construcción
del
Renacimiento,
continuada
durante
el
Barroco.
El
periodo
neoclásico
también
dejó
su
muestra.
El
siglo
XX
ha
contribuido
con
las
grandes
avenidas
y
los
amplios
espacios
verdes.
El
turista
ha
de
ir
preparado
con
un
buen
calzado
porque
para
conocer
bien
esta
ciudad
se
necesita
por
lo
menos
una
semana
y no
se
verá
todo,
siempre
quedan
fascinantes
rincones
por
descubrir.
Se
recomienda
hacer
una
lista
con
los
lugares
que
son
prioritarios
y
hacerlo
por
zonas
y no
por
estilos
ya
que
todo
está
mezclado.
Es
importante
recordar
que
prácticamente
todos
los
museos,
a
excepción
del
Vaticano,
cierra
los
lunes.
Una
vez
equipados
sólo
resta
comenzar
el
recorrido.
¡Adelante!
Roma
no
defrauda
a
ninguno
de
sus
viajeros. |