La
Comisión
Insular
de
Patrimonio
ha
decidido
que
los
hipogeos
hallados
junto
a
la
rotonda
de
Jesús
pueden
destruirse
a
pesar
de
que
los
tres
arqueólogos
que
llevaban
a
cabo
la
excavación
recomendaron
que
se
conservara
en
el
mismo
lugar.
La
única
necrópolis
romana
rural,
una
cisterna,
huesos,
cerámica
y
hasta
una
pulsera
de
cristal
negro.
Son
algunos
de
los
tesoros
que
la
empresa
de
arqueología
Posidonia
ha
encontrado
en
las
excavaciones
de
las
obras
del
segundo
cinturón
de
ronda
de
Eivissa.
Los
materiales
y
restos
hallados
se
han
enviado
al
Museo
Arqueológico,
pero
la
Comisión
Insular
de
Patrimonio
ha
señalado
que
los
hipogeos
se
pueden
destruir
a
pesar
del
informe
de
los
arqueólogos,
que
aconsejaban
su
mantenimiento.
En
total
en
la
necrópolis
se
han
hallado
19
estructuras
de
enterramiento
que
acogían
los
restos
óseos
de
cerca
de
50
personas
que
los
especialistas
creen
que
son
de
la
misma
familia.
Los
tres
expertos
destacaron
la
importancia
del
hallazgo,
ya
que
se
trata
de
la
primera
necrópolis
romana
de
carácter
rural.
«La
casa
debe
de
estar
bajo
la
finca
que
hay
sobre
la
colina»,
señala
uno
de
los
especialistas.
Otra
de
las
curiosidades
de
estos
hipogeos
(datados
entre
los
siglos
II
y
VI)
es
que
se
ha
hallado
también
un
hueco
que
suponen
que
servía
para
incinerar.
«Se
trata
de
un
panteón
familiar»,
comentan.
Los
arqueólogos
consideran
que
se
podría
haber
conservado
alterando
el
proyecto
del
segundo
cinturón
para
desviarlo
unos
metros.
Los
miembros
de
la
empresa
Posidonia
ya
esperaban
encontrar
algún
tipo
de
restos,
ya
que
en
la
Antigüedad
en
la
zona
de
Puig
d´en
Valls
se
encontraban
algunos
de
los
santuarios
a
los
que
acudían
los
habitantes
de
la
ciudad
de
Eivissa.
Los
arqueólogos
se
sorprendieron
también
de
hallar
entre
los
restos
una
pulsera
de
cristal
de
color
negro.
Los
especialistas
han
denunciado
la
situación
en
la
que
trabajaban
en
esta
excavación,
ya
que
al
no
estar
cerrada,
cuando
la
gente
se
enteró
de
que
se
habían
encontrado
las
tumbas,
acudió
para
verlas
y
tiraron
algunas
de
las
piedras
que
forman
los
hipogeos. |