Una
empresa
radicada
en
Madrid
se
ofreció
al
Ayuntamiento
de
Santo
Tomé
(Jaén)
para
hacerse
cargo
del
museo
de
interpretación
proyectado
por
el
Consistorio
al
tener
conocimiento
de
que
un
estudio
de
la
Universidad
de
Jaén
ubicó
en
dicho
municipio
la
batalla
de
Baecula,
que
el
año
208
a.C.
enfrentó
a
romanos
y
cartagineses.
En
declaraciones
a
Europa
Press,
el
alcalde
de
Santo
Tomé,
Francisco
Jiménez
Noguera,
explicó
que
una
empresa
de
Madrid
dedicada
al
diseño
de
espacios
y
contenidos
museísticos
conoció
mediante
la
prensa
que
el
Ayuntamiento
de
Santo
Tomé
planeaba
la
realización
de
un
centro
de
interpretación
sobre
la
batalla
de
Baecula,
que
históricamente
se
había
emplazado
en
las
cercanías
de
Bailén.
Jiménez
Noguera
detalló
que
el
proyecto
"llamó
la
atención"
de
uno
de
los
directivos
de
la
empresa
ya
que
éste
"es
natural
de
Cazorla",
una
localidad
próxima
a
Santo
Tomé.
El
directivo
cazorleño,
según
el
alcalde,
se
remitió
a
las
credenciales
de
su
empresa
asegurando
"una
gran
experiencia"
en
la
realización
de
museos.
De
hecho,
el
primer
edil
de
Santo
Tomé
dijo
que
ambos
concertaron
un
encuentro
que
tendrá
lugar
en
Cazorla
el
próximo
fin
de
semana
y
destacó
que
la
empresa
"parece
muy
interesada"
en
obtener
el
encargo
del
Ayuntamiento
de
Santo
Tomé.
Jiménez
Noguera
recordó
también
que
"ya
se
están
buscando"
los
terrenos
donde
se
ubicará
el
citado
museo,
en
el
que
se
espera
exhibir
restos
arqueológicos
de
la
época
íbera
junto
con
proyecciones
audiovisuales
de
la
célebre
batalla.
El
denominado
'mirador
de
Asdrubal'
se
construirá
finalmente
sobre
el
cerro
de
la
Albahaca,
donde
los
investigadores
de
la
UJA
localizaron
el
campamento
del
general
cartaginés.
El
grupo
de
investigadores
de
la
UJA
presentó
el
resultado
de
sus
estudios
el
pasado
14
de
julio.
Según
las
conclusiones
del
estudio,
que
fueron
facilitadas
a
Europa
Press,
la
batalla
de
Baecula
tuvo
lugar
en
el
cerro
de
Las
Albahacas,
junto
a
Santo
Tomé,
donde
se
hallaron
proyectiles
de
honda
realizados
en
plomo,
puntas
de
flecha,
lingotes
de
mineral
y
otro
tipo
de
evidencias.
Para
llegar
hasta
aquí,
los
investigadores
partieron
de
que
el
sitio
donde
tradicionalmente
se
había
ubicado
el
combate
"no
cumplía
varios
requisitos
topográficos
relacionados
con
las
descripciones
del
campo
de
batalla".
En
esta
batalla,
el
ejército
romano
contó
entre
35.000
y
40.000
efectivos,
mientras
que
el
cartaginés
combatió
con
25.000.
Las
fuentes
prehistóricas
destacan
que
hubo
8.000
muertos
y
12.000
heridos
en
la
contienda.