Las
poesías
de
Catulo,
un
poeta
complejo
que
cultivó
en
la
época
de
Julio
César
las
primeras
elegías,
han
sido
publicadas
en
la
traducción
de
José
María
Alonso
Gamo
quien,
al
ser
poeta,
ha
dado
una
versión
más
aproximada
de
su
obra,
comentó
Carlos
García
Gual
al
presentar
el
libro.
De
Catulo
no
existen
más
que
tres
noticias,
dos
de
las
cuales
se
deben
a
San
Jerónimo,
y su
poesía
se
ha
conservado
gracias
a
que
se
salvó
milagrosamente
un
manuscrito
con
sus
composiciones,
en
total
2.276
versos,
entre
los
cuales
existen
poemas
cortos,
epitalamios,
elegías
y
epigramas.
Anterior
y
en
cierto
modo
maestro
de
Marcial,
Juvenal
y
Virgilio, Catulo,
perteneciente
a
la
clase
alta
latina,
cuyo
ambiente
supo
reflejar,
significa
el
comienzo
de
la
poesía
refinada
romana
y
su
forma
de
escribir,
en
la
que
se
refiere
explícitamente
al
sexo
sin
cortapisas,
fue
considerada
entre
los
poetas
de
su
época,
años
antes
de
Cristo,
como
"novísima"
e
imitadora
de
los
griegos.
García
Gual
precisó
que
Catulo
cultivó
la
pasión
tanto
para
el
amor,
explícito
o
no,
como
para
el
insulto,
que
también
fue
capaz
de
reflejar
en
sus
composiciones
ahora
publicadas
por
editorial
Aache
en
su
versión
latina
con
la
traducción
de
José
María
Alonso
Gamo,
ya
fallecido,
y
un
amplio
prólogo.
Como
muestra
de
la
frescura
y
falta
de
inhibición
empleada
por
Catulo
destaca,
por
ejemplo,
"Me
preguntas
que
cuántos
besos
tuyos
para
saciarme,
Lesbia,
bastarían"
o
"Anales
de
Volusio,
mierda
escrita:
Cumplid
el
voto
de
mi
dulce
amada...".
Ramón
Irigoyen,
por
su
parte,
destacó
en
la
presentación
de
la
obra
de
Catulo
que
ningún
poeta
griego
y
latino
ha
sido
tan
leído
por
los
autores
del
siglo
XX
del
mundo
occidental
como
Catulo
y
citó
entre
ellos
a
Jaime
Gil
de
Biedma
y,
más
lejos
en
el
tiempo,
su
sátira
puede
detectarse
en
poetas
como
Quevedo
y
Góngora.
Catulo
cultivó
"toda
la
gama
sentimental",
señaló
Irigoyen
y
en
el
mundo
moderno
su
lenguaje
corrosivo
sería
comparable
en
cierto
modo
con
el
mundo
del
rock
o
del
rap,
aunque
nunca
contiene
sátira
social
y
pertenece
a
una
sociedad
donde
el
ser
poeta
es
tradición
de
clase
refinada. |