"Proserpina",
cuarto
título
del
programa
de la L
edición
del
Festival
de
Teatro
Clásico
de
Mérida,
se
representará
los
próximos
días 22
al 25 de
julio y
del 29
de julio
al 1 de
agosto,
en el
Teatro
Romano,
bajo la
dirección
de
Robert
Wilson y
protagonizada
por Emma
Suárez.
Según
informa
el
Festival
en una
nota de
prensa
remitida
a Europa
Press,
tras los
buenos
resultados
obtenidos
por 'Yo,
Claudio',
'El
sueño de
una
noche de
verano'
y
'Medea,
la
extranjera',
a partir
del
próximo
jueves,
llega al
Festival
un
espectáculo
que
enriquece
la
variedad
propuesta
en esta
edición
y que,
por lo
tanto,
mantiene
una
personalidad
muy
diferenciada
de los
que lo
han
precedido.
Se trata
de un
montaje
bello e
innovador
en el
que,
durante
algo más
de una
hora,
propone
al
público
un
ejercicio
de
estética,
de luz y
de
palabra.
De esta
forma
Wilson,
considerado
uno de
los
directores
escénicos
más
prestigiosos
del
mundo,
deja
patente
su
pasión
por el
arte, la
pintura
(galardonado
en la
Bienal
de
Venecia),
la
arquitectura
y la
luz,
que
domina
poderosamente
en
toda
la
obra,
junto
al
movimiento
de
actores
y la
intensa
presencia
en la
escena
del
Teatro
Romano
de la
figura
y la
voz de
Emma
Suárez.
UNA
MÁQUINA
DE
PRECISIÓN
La obra,
como
todas
las
creaciones
de
Wilson,
está
concebida
especialmente
para el
espacio,
en este
caso,
del
teatro
romano.Así,
asegura
que en
esta
ocasión
"el reto
ha sido
trabajar
con la
arquitectura
existente,
realzarla,
convertirla
en parte
de la
producción".
Como
todos
sus
montajes,
el
espectáculo
tiene
una
atractiva
carga
visual.
La
actriz
Emma
Suárez,
en el
papel de
'el
poeta',
guía al
espectador
en este
viaje a
través
del mito
de
Proserpina,
acompañada
por la
interpretación
gestual
de ocho
actores
y
bailarines
que dan
vida a
los
personajes
de esta
escenificación.
El
texto,
que
incorpora
líneas
poéticas
originales
de
Homero y
los
poetas
contemporáneos
Brad
Gooch y
Maita di
Niscemi,
se
convierte
en un
pretexto
para
introducir
otros
elementos
del
espectáculo
tan
importantes
como la
iluminación,
el
color,
el
movimiento,
el
vestuario,
el
diseño
del
espacio
y la
música.
La
música,
que está
presente
durante
toda la
obra, es
de
Philip
Glass,
aunque
actúa de
contrapunto
una
pieza de
Gioachino
Rossini
para la
escena
central
desarrollada
en el
infierno.
El
vestuario
de Emma
Suárez
-elegante,
sobrio y
andrógino-contrasta
con los
colores
intensos
y vivos
de la
iluminación.
A través
de todos
estos
elementos
el
director
construye
un marco
sugerente
abierto
a la
interpretación
libre
del
espectador.
LA
VERSIÓN
DEL MITO
El
subtítulo
de la
obra,
'Perséfone
en
Mérida',
se debe
a que el
director
estadounidense
ha
experimentado
y
triunfado
en otros
escenarios
del
mundo
con este
personaje,
la
versión
griega
de la
romana
Proserpina.
La
primera
vez, en
1994, en
Gibellina
(Italia),
cuando
creó'
T.S.E.',
un
trabajo
inspirado
en el
célebre
poema de
Thomas
Stearns
Eliot
'Tierra
baldía'
y
desarrollado
en un
espacio
poco
convencional:
un
granero.
Entre
las
escenas
de esa
obra
había
una
dedicada
al
antiguo
mito
griego
de
Perséfone.
Una
década
después,
la
actriz
Emma
Suárez
encabezará
el
reparto
de esta
obra,
que al
ser una
propuesta
expresa
del
Festival
de
Teatro
Clásico
de
Mérida
se
presentará
en
castellano.
El
polifacético
Robert
Wilson
es un
insaciable
investigador
de los
nuevos
lenguajes
artísticos:
danza,
pintura,
iluminación,
diseño
de
mobiliario,
multimedia,
escultura,
música,
entre
otros,
que
"desprenden
un alto
voltaje
de
emoción
y
adrenalina
estética".
Se
trata,
por
tanto,
de un
teatro
experimental
tan
"intenso
y
elaborado
como
ecléctico",
que ya
han
disfrutado
ciudades
como
Hamburgo
-donde
en 2000
presentó
'POE-try',
en
colaboración
con Lou
Reed- y
Valencia,
donde se
estrenó
su
espectáculo
'Relative
light'
con
motivo
de la
conmemoración
del año
Bach.
Entre
sus
producciones
más
recientes
se
encuentran:
'Hamlet:
a
monologue'
(estrenada
en el
Festival
Internacional
Cervantino
de
México),
'Siegfried'
(Opernhaus
Zürich)
y '14
estaciones'
(Massachusetts,
Estados
Unidos).
EMMA
SUÁREZ,
EL HILO
CONDUCTOR
La
versatilidad
de Enma
Suárez
la
convirtió
en musa
de
jóvenes
aunque
consolidados
directores,
como
Julio
Médem,
alternando
su
trabajo
con
directores
de sello
muy
distinto,
como
Imanol
Uribe o
Josefina
Molina.
A las
órdenes
de Pilar
Miró,
Suárez
obtuvo
el
Premio
Goya de
1997 por
'El
perro
del
hortelano',
película
en la
que
realizó
un
proceso
de
cristalización
de
muchos
saberes
y un
reto:
rodar un
clásico
de Lope
de Vega,
hacerlo
en verso
y además
dar vida
de forma
exquisita
a una
coqueta,
culta y
frívola
aristócrata
enamorada
de su
escribidor.
En
teatro,
y
dirigida
por
Mario
Gas
-quien
también
estará
presente
este año
en el
Festival
con 'Orestiada'-
protagonizó
en 2001
'Las
criadas',
de Genet,
con
Aitana
Sánchez
Gijón
como
compañera.
PROSERPINA,
HIJA DE
LAS
ESTACIONES
Proserpina
es la
reina
del
mundo
subterráneo
desde
que
Plutón
la raptó
y sumió
en las
profundidades
del
Averno.
A partir
de
entonces
tuvo que
dividir
el año
entre su
estancia
en los
infiernos
-durante
la época
invernal-
y su
regreso
a la
tierra
con su
madre,
la diosa
Ceres
-lo que
origina
la
primavera-.
Algo
similar
ocurrió
un
tiempo
después:
cuando
Adonis
era
todavía
un niño,
la diosa
Venus,
como era
tan
bello,
lo
ocultó
en un
cofre y
se lo
confió a
Proserpina.
Pero
ella, al
contemplar
su
belleza,
no quiso
devolvérselo.
Llevado
el caso
ante
Júpiter,
el año
fue
dividido
en tres
partes,
de
manera
que
Adonis
estuviera
una
parte
consigo
mismo,
otra con
Proserpina
y con
Venus el
resto.
Pero
Adonis
concedió
a Venus
la parte
del año
que a él
sólo
correspondía.
En un
intento
de
rescatar
a
Proserpina,
Pirítoo,
un amigo
de
Teseo,
trató de
conquistarla,
y bajó
al
inframundo
con la
intención
de
casarse
con
ella.
Como
castigo
a su
atrevimiento,
Plutón
lo sentó
para
siempre
en la
Silla
del
Olvido,
firmemente
atado
con
anillos
de
serpientes,
aunque
algunas
versiones
aseguran
que
Hércules
intercedió
por él y
lo
devolvió
al mundo
superior
ileso.