El
próximo
lunes se
presentará
en el
Hotel
Confortel
de
Badajoz,
a las 12
horas,
el
segundo
montaje
de la
50ª
edición
del
Festival
de
Mérida,
"El
sueño de
una
noche de
verano",
de
William
Shakespeare.
Según
informó
el
Festival
emeritense,
se trata
de un
espectáculo
de danza
interpretado
por la
Compañía
Nacional
de Danza
de
Portugal,
bajo la
dirección
artística
del
turco
Mehmet
Balkan,
que se
representará
en el
Teatro
Romano
los días
6 y 7 de
julio.
La
coreografía
ha sido
creada
especialmente
por
Heinz
Spoerli,
director
del
ballet
de
Zurich.
La
música,
compuesta
por
Felix
Mendelssohn,
Steve
Reich y
Philip
Glass;
será
interpretada
en
directo
en el
Teatro
Romano
de
Mérida
por la
Orquesta
Filarmonia
das
Beiras,
cuya
dirección
corre a
cargo de
James
Tuggle.
El acto
de
presentación
contará
con la
presencia
de
Mehmet
Balkan,
director
artístico
del
espectáculo,
el
director
general
de
Promoción
Cultural,
José
María
Corrales
y el
director
del
Festival,
Jorge
Márquez.
También
asistirán
varios
miembros
del
cuerpo
de
baile.
La
dimensión
fantástica
del amor
que
muestra
Shakespeare
contrasta
con la
realidad
actual
en El
sueño de
una
noche de
verano,
un
espectáculo
de danza
adaptado
especialmente
al
Teatro
Romano
que
representará
la
Compañía
Nacional
de Danza
de
Portugal,
con la
coreografía
de Heinz
Spoerli,
director
del
Ballet
de
Zurich,
y la
música
compuesta
por dos
grandes
autores
contemporáneos,
Steve
Reich y
Philip
Glass,
interpretada
por la
Orquestra
Filarmonia
das
Beiras.
El
neoyorkino
Reich es
una de
las
figuras
determinantes
de la
musical
actual y
sus
obras
han sido
interpretadas
por
algunas
de las
mejores
orquestas
y
conjuntos
del
mundo.
Philip
Glass
(Baltimore,
1937) es
el
máximo
exponente
de la
música
minimalista.
En 1976
realizó
los
arreglos
y
actualizaciones
de El
sueño de
una
noche de
verano,
escrita
por
Mendelssohn
en 1826,
compositor
alemán
que
realizó
esta
obra
cuando
tenía 17
años.
FUSION
DE ORDEN
Y
FANTASIA
En esta
composición
puede
apreciarse
la
fusión
de orden
y
fantasía
que
consagraría
su fama
como un
músico
prodigioso.
Fue un
compositor
de
valores
clásicos,
pero en
relación
a las
reglas
de esta
industria,
desprendía
un
encantador
lirismo,
un
regalo
para el
color
orquestal
y una
fuerza
de la
creación
de la
melodía
que se
debe
escuchar
para ser
apreciada.
Contrariamente
a la
representación
del
amor, lo
que
permanece
actual
en El
sueño de
una
noche de
verano
son,
según
Heinz
Spoerli,
los
cambios
de
pareja,
en los
cuales
existe
algo
casi
minimalista.
Para
Spoerli
"las
composiciones
de Reich
expresan
con
precisión,
en su
claridad
geométrica,
la
variación
de tipo
minimalista,
este
cambio
de
compañeros
amorosos.
El
concierto
para
violín
de
Philip
Glass,
sin
embargo,
con su
discurso
musical
moderno,
por un
lado, y
sus
tonalidades
melancólicas,
por
otro,
genera
una
síntesis
entre
Shakespeare,
Mendelssohn
y
nuestro
presente".