El
texto más
largo
traducido
al griego
antiguo en
los
últimos
1.500 años
no habla
sobre
dioses y
héroes,
sino de un
joven
aprendiz
de mago
llamado
Harry
Potter.
La
titánica
tarea de
traducir a
una lengua
muerta uno
de los
libros más
populares
de la
literatura
infantil
estuvo a
cargo de
Andrew
Wilson, un
profesor
británico.
"Leí un
artículo
en el
periódico
en el que
solicitaban
a alguien
que
pudiera
traducir
un texto
al griego
antiguo.
Creo que
el
objetivo
es que se
pueda
utilizar
en las
escuelas
para
motivar a
los
alumnos a
leer en
esa
lengua",
dijo
Wilson.
"Harry
Potter y
la Piedra
Filosofal"
ya ha sido
traducido
a más de
60
idiomas,
entre los
que se
encuentran
el latín y
el gaélico
irlandés.
"Todo
el mundo
me
pregunta
lo mismo:
¿cómo se
dice
Quidditch
en
griego?",
añadió el
profesor.
Licencia
poética
La
tarea
asumida
por Wilson
no se
limitó a
intentar
encontrar
una
palabra
adecuada
para
traducir
bludger
o
snitch
dorado,
palabras
del
diccionario
de
términos
no
comprendidos
por los
muggles
(aquellos
humanos
que
ignoran el
mundo de
la magia).
Wilson
basó su
estilo en
los textos
de
Luciano,
un
escritor
del Siglo
III dC,
porque
"creo que
él siempre
se
consideró
a sí mismo
como un
filósofo
con algo
de
narrador
de ciencia
ficción".
Así,
Harry
Potter es
traducido
como
"duende
guerrero",
mientras
que el
nombre del
pelirrojo
Ron Wesley
se
transforma
en "árbol
granado".
El
libro ya
fue
sometido
al
análisis
de un
verdadero
panel de
expertos:
Wilson se
lo leyó en
voz alta a
un grupo
de niños
de una
escuela
primaria
en Bedford,
la ciudad
en la que
vive.
¿El
veredicto
de uno de
los niños?
"No
entendí lo
que estaba
diciendo,
pero
reconocí
un par de
palabras y
me hizo
reír".