Las
excavaciones
sacan a
la luz
una
factoría
de
salazones
del
siglo I
d.c. que
confirma
la
actividad
industrial
desarrollada
en la
Sevilla
del Alto
Imperio.
"Estábamos
estudiando
los
materiales
hallados
en
antiguas
excavaciones
arqueológicas
desarrolladas
en la
plaza
[de la
Encarnación]
y ha
saltado
la
sorpresa:
hemos
encontrado
una
factoría
de
salazones
de
pescado
que data
del
siglo I
después
de
Cristo.
Puede
haber
hasta
cinco
piletas
de nueve
metros
cuadrados
cada una
de
ellas,
dispuestas
en
hileras
y en
excelente
estado
de
conservación".
Tal y
como
relata
el
arqueólogo
director
de las
excavaciones,
Fernando
Amores,
las
prospecciones
ejecutadas
en el
solar
del
antiguo
mercado
de la
Encarnación
siguen
arrojando
datos de
enjundia
para el
conocimiento
histórico
de la
ciudad
antigua.
En esta
ocasión,
el
hallazgo
se
localiza
en una
capa
inferior
del
terreno
en el
que se
asienta
la Casa
de las
Basas.
Allí, el
equipo
que
encabeza
Amores
ha
descubierto
una
formación
de
piletas
utilizadas
para el
almacenamiento
portuario
de
pescado,
vino y
vajillas
de
importación
provenientes
de la
Galia
romana.
El fondo
de estas
piletas
está
lleno de
escamas
y
espinas
de
pescado
que
serán
enviadas
para su
análisis
a
especialistas
de
ictiofauna
de la
Universidad
Autónoma
de
Madrid.
Una de
las
cuestiones
que
deberán
de
dilucidar
los
expertos
es si se
trata de
productos
llegados
del mar
o del
cercano
río. No
en vano,
el cauce
se
situaba
en esa
época en
el
entorno
de la
Plaza
del
Duque y
la calle
Amor de
Dios, y
la costa
se
localizaba
a la
altura
de Coria
y de
Puebla
del Río.
El
hallazgo
de estos
materiales
aporta
información
de
enorme
valía
sobre la
actividad
industrial
y
económica
que se
desarrollaba
en
Híspalis,
y por
extensión
en la
Bética y
en toda
Lusitania,
en la
época
del Alto
Imperio
romano.
En tal
sentido,
Fernando
Amores
sostiene
que el
descubrimiento,
que
confirma
las
primeras
impresiones
de su
equipo
respecto
a su
interés
científico,
"abre
expectativas
sobre
qué
modelo
de
ciudad
existía
en esa
época
altoimperial".
"Los
restos
hallados
-añade
el
arqueólogo
jefe de
las
excavaciones-
son muy
importantes
y
llamativos
y
enriquecen
la
capacidad
museística
de la
Encarnación:
nos
permiten
contemplar
el
relato
de la
evolución
de la
ciudad
desde su
etapa
industrial
romana
hasta la
época de
uso
residencial
y su
posterior
cristianización".
Amores
remarca
que la
factoría
de
salazones
tuvo que
abandonarse
en torno
a los
años
60-70
después
de
Cristo:
"Eso
significa
que en
época
más o
menos
del
emperador
Trajano
debió de
haber
una
reforma
importante
del
trazado
de la
ciudad,
y tal
vez un
traslado
de las
instalaciones
portuarias
a una
zona
situada
en el
entorno
de la
Catedral".
Esta
búsqueda
de
restos
de la
Sevilla
romana
no es la
única
que ha
acontecido
en la
Encarnación.
Entre
otros
restos
de gran
valor
descubiertos
se
hallan
las
cinco
casas
almohades
del
periodo
musulmán
tardío
encontradas
el
pasado
verano;
los 19
mosaicos
romanos
y un
ábside
perteneciente
en
principio
a un
edificio
cristiano
primitivo
y cuyo
referente
más
cercano
puede
ser el
baptisterio
del
Patio de
Banderas.
La
importancia
histórica
de los
hallazgos
-una
verdadera
huella
de las
diferentes
etapas y
culturas
que ha
atravesado
la urbe
hispalense
en su
historia-
certifica
la
necesidad
de que
continúen
las
excavaciones
arqueológicas
en el
solar de
7.000
metros
cuadrados
de la
Plaza de
la
Encarnación.
A la
espera
de la
obtención
de más
fondos
públicos
para la
continuación
de los
trabajos
de
intervención,
los
arqueólogos
capitaneados
por
Fernando
Amores
concluyen
en estas
fechas
el
desenterramiento
de un
mosaico
de 50
metros
cuadrados
descubierto
en la
renombrada
como
Casa de
las
Columnas.
La próxima
semana
llegará el
equipo de
expertos
británicos
A primeros
de la
próxima
semana
arriba a
la ciudad
un equipo
de
expertos
británicos
de la
Universidad
de
Southampton.
Este grupo
de
técnicos
se
encargará
de la
prospección
geofísica
de la zona
en la que
aún no se
han
desarrollado
excavaciones
arqueológicas
(en torno
a la mitad
del suelo:
algo más
de 3.000
metros
cuadrados).
El
director
del equipo
anglosajón
es Simon
Keay,
experto en
la época
romana y
profesional
de
prestigio
por sus
trabajos
en el
Puerto de
Roma y, en
España,
por sus
prospecciones
en
Tarragona,
Itálica y
Peñaflor.
La labor
de
prospección,
que se
prolongará
durante
toda la
semana,
permitirá
atisbar
qué tipo
de
descubrimientos
se
desvelarán
en las
futuras
excavaciones
y se usará
como una
particular
hoja de
ruta de
las
posteriores
intervenciones
arqueológicas
que se
practiquen.
Los
expertos
piden una
mayor
difusión
La
plataforma
de
expertos
de la
Encarnación
mostró
ayer su
disconformidad
con "la
forma en
que se
está
poniendo
al alcance
de los
ciudadanos
la
importancia
histórica
y cultural
de los
restos,
limitada
hasta
ahora a
unos
escasos e
incompletos
paneles
informativos".
El
colectivo
considera
"inaplazable"
la
elaboración
de un
programa
de
comunicación
y difusión
de los
trabajos
de
investigación
realizados
en el
solar, tal
y como
prometieron
en su día
las
administraciones
implicadas.
Con ellos,
los
expertos
pretenden
que haya
"un
contacto
directo de
los
ciudadanos
con los
restos
arqueológicos
del
espacio de
la
Encarnación,
que
constituyen
un
extraordinario
depósito
de la
memoria
histórica
de
Sevilla".
La valía
de los
restos
hallados
en la
plaza
invita a
los
expertos a
solicitar
que los
trabajos
de
investigación
"se hagan
extensivos
al cien
por cien
del solar
de forma
ininterrumpida,
con el fin
de
garantizar
que los
mismos
deben
haber sido
puestos en
valor e
interpretados
en su
totalidad". |