en culturaclasica.com

en toda la Web

Practica el latín vivo (descargate las dos revistas en latín. formato pdf)

 

Chat en latín

 

Por su interés, culturaclasica.com reproduce este artículo

22/02/2004

Madrid ● El Mundo/ EFE

Sugiere una 'Ley del español?
Rodríguez Adrados se pregunta '¿Qué es España?' en su ingreso en la Real Academia de la Historia
Francisco Rodríguez Adrados, uno de los mayores expertos internacionales en lenguas clásicas, considera, en su discurso de ingreso en la Real Academia de la Historia, que la enseñanza, al menos la primaria y la secundaria, deberían haber quedado en manos de los instrumentos centrales de Gobierno de la nación.

Nunca debería haberse cedido la enseñanza de la lengua y de la historia porque "son el centro mismo de nuestro ser de españoles", afirmó Rodríguez Adrados en su discurso de ingreso, '¿Qué es Europa? ¿Qué es España?', que fue contestado por Carmen Iglesias.

Tras elogiar la actuación de su predecesor en la Real Academia de la Historia, Antonio Domínguez Ortiz, Francisco Rodríguez Adrados reflexionó en su discurso sobre el ser y la esencia de Europa y España y sus mutuas relaciones a lo largo de la historia.

Francisco Rodríguez Adrados señaló que "el fomento de las lenguas vernáculas habría debido combinarse con una definición clara, en una Ley del Español".

La académica Carmen Iglesias destacó que Rodríguez Adrados cuenta con más de 30 libros y casi un millar de publicaciones sobre diferentes lenguas, desde el griego hasta el indoeuropeo, pasando por el sánscrito o la cultura india, todos ellos con una escritura que sabe aunar el dato riguroso del investigador con la síntesis y la capacidad de abstracción.

También recordó su actividad como presidente de la Sociedad de Estudios Clásicos y dijo que, en numerosas ocasiones, Rodríguez Adrados "ha zaherido irónicamente el lamentable complejo de inferioridad y la papanatería que afecta a muchos sectores de la inteligencia española en su relación con el mundo europeo y occidental".

Para el profesor Adrados, señaló, la democracia es "esa posibilidad de vivir dentro del conflicto, pero conciliados; es el invento o artefacto político que, hasta ahora, mejor corresponde al impulso de la naturaleza humana hacia la libertad" y, "por eso, hay que preservarla".

Nuestra democracia "se basa en un pacto o conciliación que, después de la revolución consiguiente, establece unas reglas de juego sobre las que pivotar los cambios sin peligro de desintegración del sistema".

Nadie conquistó a los vascos

En su discurso de ingreso, Rodríguez Adrados dijo que nadie conquistó a los vascos, que "vascos y castellanos eran todos lo mismo" y que "los redactores de las glosas emilianenses y silenses escribían indistintamente en las dos lenguas"."Fueron castellanos desde que se inventó Castilla, sin dejar de ser vascos", puntualizó.

Para Rodríguez Adrados, España es un concepto bien definido geográficamente en una península, y su historia ha consistido en crear una unidad a partir de los multiples "hispani" romanos convertidos en un pueblo y en una nación, algo que, según dijo, Europa "no llegó a ser nunca".

En este territorio, conquistado el año 714, surgieron "desde muy pronto núcleos de resistencia" en la Cordillera Cantabrica y los Pirineos que trataban de reconstruir la Hispania destruida.

Todos ellos "consideraban a España una unidad, lloraban por su destrucción o se ayudaban en las batallas decisivas contra el moro", dijo Adrados, y añadió que si bien España se fue recreando a base de matrimonios y pactos, las guerras fueron siempre contra los enemigos externos y contribuyeron a afianzar la unidad.

Europa

Para Adrados, "Europa sólo ahora está llegando, en cierta medida, a ser una unidad política", ya que hasta ahora era una unidad cultural, y subrayó que "España es y ha sido siempre parte de Europa", pero "con caracteres y circunstancias singulares".

España, si bien tuvo desde muy pronto una unidad política, desintegrada y reconstruida una vez y otra, y con aproximaciones y alejamientos periódicos respecto a Europa, ahora se debate, puntualizó Adrados, entre la tendencia unitaria y la pluralizante, aunque nunca "ha dejado de ser España".

El impulso de unificación fue sustituido en España por un continuo y alternativo proceso de conflicto, pero también por un acuerdo entre fuerzas tradicionales y otras de nueva apertura, y desde una versión unitaria del Estado a otra más abierta que va del autonomismo al puro independentismo.

La Constitución de 1978 intentó equilibrar esas tensiones porque "una democracia no puede funcionar sin unas mínimas reglas de juego, señaló, de las que no pueden pasar las tendencias enfrentadas para conseguir una síntesis que se llama Estado de las autonomías".

En esta labor ha tenido éxitos, pero está sometido a una tensión constante y a veces muy fuerte que, si bien hizo avanzar la idea de autonomismo, es hoy el principal valladar contra sus excesos, que son manejables y reducibles a límites democráticos gracias a ella y los poderes que la apoyan.

Current Date/Time 2

Enlaces relacionados

 
 


quienes somos| colaborar | publicidad | estadísticas | contactar | patrocinadores

©Agamador & Tiresias. Asociación cultural CULTURACLASICA.COM
asociacion@culturaclasica.com