El
autor
madrileño
explicó
que el
concepto
"línea
clara",
que
define
su
poesía,
lo
tomó
prestado
de una
crítica
que
hizo
José
Luis
García
Martín
de su
libro
"El
hacha
y la
rosa"
y
alude
a la
"comunicabilidad
en
verso".
Con
esta
idea,
De
Cuenca
recurre
a los
cómics
del
dibujante
Hergé,
como
"Tintín",
en los
que
los
dibujos
aparecen
muy
definidos
y
están
formados
por
colores
homogéneos,
afirmó
que
"este
es un
concepto
trasladado
a la
poesía,
es la
antítesis
del
impresionismo".
Además
de
traductor
de
latín
y
griego,
este
poeta
es
miembro
del
Consejo
Superior
de
Investigaciones
Científicas
y,
según
Eguizábal,
su
libro
"La
caja
de
plata"
(1985)
puso
"un
antes
y
después
en la
poesía
española".
El
hasta
hace
pocos
días
secretario
de
Estado
de
Cultura
y
antiguo
director
de la
Biblioteca
Nacional,
dijo
que la
política
le ha
dejado
tiempo
para
la
poesía,
"ya
que
tiene
la
ventaja
de que
se
puede
escribir
en
cualquier
momento
de la
actividad
diaria"
y
reconoció
que en
los
últimos
cuatro
años
ha
publicado
más
que
nunca.
Sobre
la
influencia
de la
política
en su
obra
literaria
añadió
que
"el
que
tiene
una
mirada
poética
sobre
el
mundo
y las
cosas
acaba
siempre
encontrado
argumentos
sobre
cualquier
filón,
sea
este
cual
fuere"
e
incidió
en que
escribió
más
poemas
ligados
a la
vida
política
antes
de su
"fugaz
paso"
por
ella.
En su
opinión,
"se
escriben
mejor
poemas
de
contenido
político
cuando
no
está
uno
inmerso
en esa
tarea
hasta
el
cuello,
pero
no
cabe
duda
de que
el
poeta
está
dotado
desde
su
nacimiento
de esa
mirada
lírica
del
mundo".
De
Cuenca
opinó
que
"el
nuevo
Gobierno
socialista
se va
a
dejar
ver
más en
el
mundo
cultural
que el
Ejecutivo
del PP,
porque
los
Gobiernos
socialdemócratas
suelen
ser
algo
más
intervencionistas
que
los de
carácter
liberal".
En
cuanto
al
momento
que
atraviesa
la
poesía
escrita
en
español,
dijo
que es
"muy
plural
y
diverso",
pero
reconoció
que
"hay
voces
muy
diferenciadas,
tanto
en
España
como
en
América
Latina".