Las
IV
Jornadas
Cordobesas
de
Arqueología
Andaluza
pretenden
convencer
a los
políticos
de que
"el
pasado
de
Córdoba
es la
mejor
baza, su
principal
activo,
para
lograr
el
título
de
Capital
Europea
de la
Cultura
en el
2016",
según
afirmó
el
director
del
encuentro,
el
catedrático
de
Arqueología
de la
Universidad
de
Córdoba,
Desiderio
Vaquerizo.
Para
lograr
este
objetivo
han
invitado
a
representantes
de
ciudades
que han
sabido
rentabilizar
su
pasado
(Mérida
y
Tarragona)
y a los
responsables
de las
administraciones
de
Córdoba
para que
participen
como
ponentes.
Las
jornadas
se
inauguraron
ayer en
Filosofía
y
Letras.
"Queremos
dar una
llamada
de
atención
a la
clase
política
y a la
estructura
económica
y social
de la
ciudad
de que
la
arqueología
no
supone
un
problema
que
paraliza
la vida
de la
ciudad,
sino que
debe
entenderse
como un
privilegio
y como
una
fuente
de
riqueza
si se
utiliza
para el
disfrute
de los
ciudadanos
como han
hecho en
Mérida y
en
Tarragona",
explicó
Vaquerizo.
FIN DE
LA
DESTRUCCIÓN
Una de
las
propuestas
básicas
de estas
jornadas
es que
termine
la
destrucción
de los
restos
arqueológicos
que no
estén
suficientemente
documentados.
Según
los
expertos,
en los
últimos
15 años
se ha
destruido
en
Córdoba
tanto
patrimonio
de época
romana y
califal
sin
documentar
que ya
la
ciudad
no se
puede
permitir
el lujo
de
perder
ni una
piedra
más.
Una
segunda
propuesta
es la de
no
ocultar
los
restos
arqueológicos,
sino por
el
contrario
mostrárselos
al
ciudadano
de
manera
divulgativa
para que
la
población
los
entienda
y los
defienda
como
algo
valioso.
La idea
es crear
parques
arqueológicos,
en los
que los
ciudadanos
puedan
pasear
por
ellos y
a la
misma
vez
puedan
conocer
de forma
divulgativa
los
porqués
de la
importancia
de esas
piedras,
a través
de
reconstrucciones
virtuales
de lo
que fue
Córdoba
a lo
largo de
los
siglos.
Otra
propuesta
que se
plantea
en las
jornadas
es la
realización
de ocho
o diez
exposiciones
monográficas
de cara
al 2016
sobre
los
distintos
periodos
históricos
que ha
vivido
Córdoba
como el
romano,
el
visigodo,
el
califal
o el de
la
Reconquista.
"Hay que
espabilarse
de cara
a la
capitalidad
cultural
europea
del
2016,
porque
no queda
tanto
tiempo.
Nosotros,
un
equipo
formado
por más
de 50
especialistas,
tenemos
los
medios,
pero
necesitamos
el apoyo
político
y los
recursos
para
convertir
la
arqueología
en el
activo
principal
para
lograr
la
capitalidad
cultural
de
Europa",
dijo
Vaquerizo.
Estos
expertos
piden
inversiones
permanentes
en la
ciudad
como son
salas de
exposiciones,
museos,
itinerarios,
parques
arqueológicos
y apoyo
para
desarrollar
nuevos
sectores
económicos
como el
de los
artesanos.
"La
arqueología
es un
fuerte
yacimiento
de
empleo.
Actualmente,
hay
veces
que hay
más de
mil
personas
trabajando
en los
restos
arqueológicos",
dijo el
director
de las
jornadas
andaluzas.
SALAMANCA
Por su
parte,
el
catedrático
de
Arqueología
de la
Universidad
de
Salamanca,
Jesús
Liz
Guiral,
que
ofreció
la
conferencia
inaugural,
comentó
respecto
a la
experiencia
de
Salamanca
como
Capital
Europea
de la
Cultura
que "hay
un antes
y un
después"
del
título,
que
merece
la pena,
pero que
en la
experiencia
salmantina,
la
arqueología
no tuvo
repercusión.