Los robos
y el
vandalismo
están
amenazando
la rica
herencia
cultural
de Italia
y sólo en
2003 se
sustrajeron
unos 7.000
artefactos,
informó la
policía
especializada
en robos
de piezas
de arte.
El
general
Ugo Zottin,
la
principal
autoridad
policial
contra el
robo de
arte en
Italia,
dijo que
el número
de delitos
reportados
descendió
con
respecto
al año
anterior,
pero
indicó que
su batalla
continuará.
"Las
estadísticas
son
preocupantes
pero la
buena
noticia es
que el
número de
delitos
fue de
alrededor
de 20 por
ciento más
bajo que
el año
pasado.
Eso es
positivo,
pero la
batalla
continúa",
señaló.
"Nuestra
herencia
cultural
es la
expresión
de nuestra
historia,
la
historia
de nuestra
nación, y
es vital
que la
protejamos",
dijo
Zottin.
Los
robos se
concentraron
principalmente
en
monedas,
pero
también
fueron
robadas
pinturas,
armas y
muebles de
colecciones
privadas,
iglesias y
sitios
arqueológicos.
En los
34 años
desde que
fuera
fundada,
la policía
que
combate el
delito
contra el
arte,
conocida
formalmente
como
policía
para la
protección
de la
herencia
cultural,
ha reunido
una base
datos
fotográficos
de más de
240.000
piezas de
arte
robadas.
"Las
fotos son
vitales
para
ayudarnos
a rastrear
los
artículos
robados",
dijo
Zottin,
quien
agregó que
su equipo
ha dado un
número
significativo
de golpes.
La
operación
"Ataque al
robo de
arte"
recuperó
10
pinturas,
todas de
cientos de
años de
antigüedad,
robadas en
2000 de la
iglesia de
San Giusto
en
Volterra,
Toscana, y
vendidas
en el
mercado
negro.
Nicola
Bono,
subsecretario
del
Ministerio
de
Cultura,
dijo que
los
delincuentes
deben
esperar
poca
compasión.
"Estos no
son sólo
ladrones,
son
vándalos",
indicó.