Ambos
proyectos
tienen
nombres
en latín
y están
relacionados
con la
época
romana,
cuando
el
transporte
marítimo
tenía
una
importancia
para
comunicar
las
principales
ciudades
del
imperio.
El Port
de
Tarragona
acaba de
presentar
dos
proyectos
por un
valor de
4,8
millones
de euros
al
programa
europeo
Marco
Polo,
cuyo
principal
objetivo
es
potenciar
el
transporte
marítimo
de corta
distancia
para
reducir
el
tráfico
en las
carreteras
y, por
tanto,
la
seguridad
en las
mismas.
La
Autoritat
Portuària
de
Tarragona
cree
que, a
diferencia
del
pasado
año
cuando
junto a
Tarraco
Line
presentó
un
proyecto
al
programa
Mini
Pact
2002
pero no
obtuvo
financiación
al
quedar
en
séptima
posición,
en esta
ocasión
existen
más
posibilidades.
En
primer
lugar,
porque
el de
Tarragona
es el
único
puerto
del
Estado
que se
ha
presentado
a la
convocatoria
y, en
segundo,
porque
los
proyectos
cuentan
con la
participación
de
importantes
empresas
químicas
y de
otras
autoridades
portuarias.
Ambos
proyectos
tienen
nombres
en latín
y están
relacionados
con la
época
romana,
cuando
el
transporte
marítimo
tenía
una
importancia
para
comunicar
las
principales
ciudades
del
imperio.
El
primero
se
denomina
Trojanus,
tiene un
presupuesto
de
cuatro
millones
y cuenta
con el
apoyo de
las
principales
empresas
químicas
presentes
en
Tarragona:
BASF,
Dow,
Bayer,
Repsol,
Clariant,
Celanese,
Aiscondel
y Erkol.
El
objetivo
del
proyecto
es
demostrar
que una
ruta
entre
Tarragona
y Génova
dos días
a la
semana
sería
viable y
permitiría
transferir
alrededor
de
200.000
toneladas
al año
de las
carreteras
al mar,
lo que
supondría
unos
ahorros
ambientales
de más
de 14
millones
de
euros.
Otro
argumento
sobre la
idoneidad
de la
ruta es
que se
emplearía
prácticamente
el mismo
tiempo
en hacer
el
transporte
por mar
que por
carretera
pero, en
el
primer
caso, se
podría
trabajar
los
fines de
semana
que es
cuando
están
cerradas
para los
camiones
las vías
terrestres.
El
segundo
proyecto
presentado
se
denomina
Navigium
Isidis,
ha sido
impulsado
por las
autoridades
portuarias
de
Salerno
(Italia),
Cartagena
y
Tarragona
y
persigue
la
organización
de un
ciclo de
conferencias
en cada
una de
estas
ciudades
para
profundizar
sobre la
modalidad
de
transporte
marítimo
de corta
distancia,
conocido
en
terminología
inglesa
como
short
sea
shipping.
Su
presupuesto
es de
800.000
euros y
prevé
también
la
creación
de una
página
web, que
se
inauguraría
coincidiendo
con la
primera
conferencia
en julio
de 2004
y
estaría
activa
hasta la
última,
prevista
para
noviembre
de 2005
y
actuaría
como
foro
abierto
a todo
el
sector
del
transporte
europeo.
Las dos
propuestas
se
presentaron
el 10 de
diciembre
y ahora
la
Comisión
Europea
tiene
cuatro
meses
para
estudiarlas.
Huerto
solar
Por otro
lado, el
Port de
Tarragona
presentó
ayer a
la
comunidad
portuaria
un
proyecto
para
reducir
la
factura
eléctrica
y las
emisiones
de
dióxido
de
carbono
de las
empresas
que se
adhieran.
En
concreto,
se
trataría
de
desarrollar
lo que
ellos
han
bautizado
como
huerto
solar,
un
espacio
donde se
concentrarían
instalaciones
solares
fotovoltaicas
que las
empresas
interesadas
podrían
utilizar
para
generar
electricidad
y
venderla
y
dedicar
los
ingresos
conseguidos
a
reducir
su
factura
eléctrica.
|