P. Dávila y P. Caballero | Zalamea de la Serena (Badajoz) www.hoy.es 18/06/2010

Los trabajos arqueológicos forman parte del proyecto para construir una hospedería en el antiguo palacio de los Zúñiga.

Las excavaciones arqueológicas en el castillo de Zalamea de la Serena han propiciado el hallazgo de un muro de origen romano de notables dimensiones así como algunos restos de la Edad de Hierro. Fuentes de la investigación aseguran que se puede datar la ocupación de la zona desde el siglo V antes de Cristo.

Estos trabajos arqueológicos en el castillo vienen motivados por el proyecto de construcción de una hospedería, sufragada por el Ministerio de la Vivienda en el antiguo palacio de los Zúñiga.

El edificio de finales del siglo XV está adosado a la fortaleza conocida como castillo de ‘Arribalavilla’, y antes de realizar su transformación en establecimiento hotelero se ha llevado a cabo una intervención arqueológica dirigida por Sabab Walid Sbeinati con la colaboración de Juanjo Pulido y Sebastián Celestino.

Esta actuación iniciada el pasado 20 de abril, que ha sido financiada por el ayuntamiento de Zalamea de la Serena, acaba de finalizar. Los resultados obtenidos pendientes de un estudio pormenorizado, han sido del todo satisfactorios a la vez que «imprevisibles».

En esta primera excavación se ha dejado a la vista la planta baja del palacio de don Juan de Zúñiga, ocultada por el derrumbe de parte del edificio y por la presencia en el edificio del cementerio municipal desde el primer cuarto del siglo XIX hasta 1976. No obstante en la zona estudiada y situada ya en el interior de la fortaleza se han localizado bajo niveles medievales muy arrasados una serie de vestigios que nos sitúan en los orígenes del asentamiento humano en lo que hoy conocemos como Zalamea de la Serena.

Del siglo V
La presencia de varias estructuras y niveles de uso en la edad del hierro así como la localización de un muro de notables dimensiones de época romana, que podría pertenecer a un edificio de cierta entidad, hace que se pueda establecer una ocupación de esta zona, posiblemente desde el siglo V antes de Cristo, hasta por lo menos el siglo I después de Cristo.

Con toda seguridad, el estudio del resto del espacio en sucesivas fases de excavación, aportará una mayor información al conocimiento de los antecedentes históricos de la villa.