Sagunto (Valencia) www.panorama-actual.es 15/01/2008

Calero advierte que el cumplimiento de la sentencia del Supremo supondría «la ruina» para los saguntinos.

La portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Sagunto, Gloria Calero, aseguró este martes que el fallo del Tribunal Supremo que obliga a la reversión de las obras de rehabilitación del Teatro Romano en 18 meses plantea «algo imposible y que causaría daños irreparables al mayor monumento de nuestra ciudad». Por ello, la también exalcaldesa del municipio advirtió de que «no queremos el éxito de una venganza ni permitiremos que lleven a Sagunto a la ruina». Con estas frases, Calero aseguró que los saguntinos no pagarán la «dramaturgia» interna del PP valenciano.

En un artículo de opinión remitido a los medios de comunicación, Calero compara la polémica suscitada en torno al Teatro Romano con la obra de Federico García Lorca ´Bodas de Sangre´, «llena de amores, luchas, odios termina con los protagonistas fuera de escena o guardando sus penas en el interior».

La representante del PSPV apuntó, en referencia al abogado Juan Marco Molines -autor del recurso contra la rehabilitación de Grassi y Portaceli- que «los ciudadanos han escuchado o leído con asombro que el iniciador de todo este proceso, motivado obviamente por la maquinaria de venganza política que comenzaron los populares contra todo lo que fuera obra socialista en la Generalitat, dice que «podría haber existido una solución, si alguien con autoridad, se hubiese puesto en contacto con él». «Son palabras del ex diputado del PP, que acusa a sus pares de ´prepotentes´ y califica a la actual titular de Cultura de ´ignorante´», agrega.

Para Calero, es «evidente que existe una boda de sangre entre zaplanistas y la actual administración». «Pero, por qué razón tenemos que pagar los saguntinos las consecuencias de la dramaturgia interna de este partido, que entre la obsesión en el bordillo de la locura de un jurista y una Generalitat que lo ignora, culmina recayendo sobre nosotros un fallo que plantea algo imposible y que causaría daños irreparables al mayor monumento de nuestra ciudad», se pregunta.

Agrega que el alcalde de la ciudad, Alfredo Castelló, «debe haber recibido también una llamada a la prudencia de sus mayores de Valencia ya que del ´que se derribe´ tan suelto de cuerpo y espíritu que manifestó, ahora dice que ´buscará consenso´». «¿Cuál será la razón?», inquiere Calero.

En su opinión, «si algo está claro es que no tiene ningún sentido devolver a la ruina un referente cultural y con tanto potencial como el Teatro Romano». «Pero del PP -prosigue- se puede esperar cualquier cosa, parafraseando al dramaturgo: tienen la amargura de llevar el pecho frío y traspasado por linternas sordas que dirigen sobre él los otros. Son capaces de derribar este Teatro y prometernos que nos van a construir uno nuevo al lado».

«Sentido común»
Por su parte, el PSPV, «junto a muchos colectivos y ciudadanos y ciudadanas con sentido común y sensibilidad, seguiremos trabajando por encontrar una salida a este drama cuyos argumentos son tan endebles como irracionales, pero de consecuencias muy graves si se cierra el telón con la ejecución de la sentencia», avanzó.

Por ello, confió en que «si se aplica alguna reversión en torno al Teatro, sea para terminarlo, embellecerlo y dotarlo de una infraestructura permanente que permita darle un uso para el cual se hizo».

Por último, la portavoz socialista expresa su deseo de que «se apoye económica y políticamente a todos los comercios de la zona, se rehabiliten las casas en estado de abandono y las áreas desprotegidas y que se realice un plan de adecuación de su entorno que sea más atractivo para el turismo, para la cultura y para que sea un orgullo para nuestros ciudadanos y ciudadanas».