DPA | Líbano 11/03/2009

La delicada situación que vive el país supone una grave amenaza para los cinco conjuntos de restos arqueológicos reconocidos por la UNESCO.

La grave situación que se vive estos días en Libia pone en peligro el patrimonio cultural del país, aunque hasta el momento no se haya informado de saqueos o destrozos. El Estado africano cuenta con cinco ´joyas´ declaradas patrimonio cultural de la humanidad por la UNESCO que podrían verse amenazadas.

Las grandes obras del patrimonio cultural libio a proteger son las siguientes:

–Las ruinas de Leptis Magna
La ciudad portuaria que perteneció a los romanos desde el año 46 a.C. fue, después de Roma y Cartago, la tercera metrópolis del imperio. En su etapa dorada, entre los años 120 y 220, varios emperadores construyeron imponentes edificios. Tras ser destrozada por los conquistadores árabes en el año 642, la ciudad –120 kilómetros al este de Trípolis– desapareció entre la arena del desierto. A partir de 1920, los arqueólogos sacaron a la luz las ruinas romanas mejor conservadas fuera de Italia. Hoy puede verse un anfiteatro para 16.000 espectadores, una imponente columnata, termas, templos y viviendas. Son patrimonio de la UNESCO desde 1982.

– Las ruinas de Sabratha
En los siglos 2 y 3 d.C. se desarrolló una floreciente ciudad romana a partir de un puerto fenicio mediterráneo situado al final de una importante ruta comercial. Situada 70 kilómetros al oeste de Trípoli, las bien conservadas ruinas de un teatro con 500 plazas, un forum rodeado de columnas y varios templos e iglesias precristianas dan una imagen de su antiguo explendor. También patrimonio de la UNESCO desde 1982.

–Las ruinas de Cirene
Cirene fue una ciudad griega fundada en el año 631 a.C. en la colonia Cirenaica, en el noreste de Libia. Algunos de sus imponentes templos se han mantenido hasta hoy. A partir del año 96 a.C., los romanos construyeron también magníficos edificios. También forma parte del sitio arqueológico declarado patrimonio en 1982 una basílica con delicados mosaicos.

– Pinturas rupestres de Tadrart Acacus
Las pinturas más antiguas de esta región desértica, situadas cerca de la frontera con Argelia, tienen 14.000 años. A esos dibujos, realizados en el entonces territorio fértil, se añadieron nuevos tipos de animales a lo largo de los siglos. Si primero hombres con arco y flechas cazaban búfalos, antílopes o elefantes, luego se sumaron pastores con vacas, ovejas o caballos. Patrimonio UNESCO desde 1985.

­La Ciudad Vieja de Ghadames La ´perla del desierto´ cerca de la frontera entre Libia, Túnez y Argelia, es desde la antigüedad un centro comercial en la encrucijada de varias rutas. Hoy este oasis es un impresionante ejemplo de la arquitectura tradicional del Sáhara. En la ciudad, rodeada de altas murallas, se levantan construcciones de barro encaladas con varios pisos y azoteas entre los sombríos y estrechos callejones. Esta construcción fue declarada patrominio de la UNESCO en 1986.