Cristina Martínez | Alicante www.diarioinformacion.com 03/03/2009

El Museo Arqueológico Nacional y el Louvre han cedido las piezas para la muestra que completará la exposición del British sobre la belleza griega.

Se vieron las caras por última vez a finales del siglo XIX. Después, una de ellas permaneció en el Museo del Louvre y la otra regresó a España y se quedó en el Museo Arqueológico Nacional (MAN). Desde entonces, las dos esfinges de Agost han permanecido separadas y no ha habido ocasión de volver a exhibirlas de manera conjunta hasta ahora. Será en el Museo Arqueológico de Alicante, a partir del próximo 2 de abril. En esa fecha, la muestra «La belleza del cuerpo. Arte y penamiento en la Greciad Antigua», con más de 120 piezas procedentes del British Museum, ocupará las tres salas principales del centro. Al lado, en la Biblioteca del museo, se exhibirá «Huellas griegas en la Contestania» y de ella formarán parte estas dos esculturas.

Las esfinges de Agost son dos de las piezas que el MARQ considera fundamentales para entender la influencia griega en Alicante. Por ello, hace unos meses los técnicos del museo iniciaron las gestiones para conseguir reunir las dos obras, algo que supondrá un hecho histórico a nivel museístico.

El pasado mes de diciembre, el Museo del Louvre dio el visto bueno a que su esfinge se desplazar hasta Alicante para participar en esta exposición. Sin embargo no fue hasta la semana pasada cuando el Museo Arqueológico Nacional comunicó su conformidad a que la pieza, que ahora se exhibe en la muestra «Tesoros del MAN», visite la ciudad entre abril y septiembre.

Las dos piezas fueron encontradas de forma casual en 1893 mientras se realizaban los trabajos de cimentación de un edificio, en un solar junto al casco antiguo de Agost, llamado Camp de l’Escultor. Un coleccionista francés, Arthur Engel, las compró y las depositó en el Louvre. En 1941, tras las gestiones realizadas por el gobierno español, una de ellas se recuperó y pasó a formar parte de los fondos del MAN.

La importancia de estas piezas es que reflejan un evidente influjo heleno, por la postura de su cabeza y su posición sentada. Esas esfinges eran seres mitológicos híbridos con el cuerpo integrado por rasgos de diferentes animales. Parece que se esculpían para utilizarlas como protectoras para los difuntos por lo que se colocaban en las tumbas.

Las huellas de Grecia en la Contestania
Las dos esfinges de Agost se convertirán en piezas fundamentales de la exposición «Huellas griegas en la Contestania», que completará la que ocupará las salas principales del MARQ procedente del British, bajo el título «La belleza del cuerpo. Arte y pensamiento en la Grecia Antigua». La muestra se exhibirá en la Biblioteca del Museo Arqueológico de Alicante, lo que era la antigua capilla del Hospital Provincial. Comisariada por el director técnico del MARQ, Manuel Olcina, esta exposición pretende realizar un recorrido por la influencia que tuvo el mundo griego en Alicante, con alrededor de 40 piezas halladas en yacimientos de la provincia, muchas de las cuales se encuentran en diferentes museos, como los ya mencionados MAN y Louvre, además del Museo Arqueológico Nacional de Catalunya, entre otros. La exposición tendrá una disposición central de las piezas y soportes informativos. Entre los elementos que se van a reunir se encuentran piezas relacionadas con la escritura, la cerámica y la numismática en época ibérica, mientras la zona que corresponde al ábside se dedicará a la escultura.