Antonio López | Cartagena (Murcia) www.laverdad.es 25/09/2011

Tropas y legiones recorren la ciudad en un desfile animado y aplaudido que duró tres horas. Figurantes ataviados con cabezas de caballos y acróbatas y malabaristas lanzando llamas arrancaron los aplausos del público.

Gladiadores luchando con escudo y espada, malabaristas, acróbatas, bailarinas, zancudos gaiteros y fuego, mucho fuego, el mismo que unión a vencedores y vencidos, a carthagineses y romanos en las calles de la ciudad, en el gran desfile de las fiestas, que durante tres horas congregó a numeroso público en el Paso de Alfonso XIII y la Alameda de San Antón.

Los organizadores del último y principal pasacalles de las fiestas habían anunciado que la comitiva sería más ágil que en años anteriores para no cansar al público, pero lo cierto es que ni los grupos tardaron dos horas como tenían previsto en recorrer la distancia que va de la calle Esparta (puerta trasera de la Asamblea regional) hasta el campamento, ni duró, cuatro horas como años anteriores.

Duró poco más de dos horas y media. La última legión romana, que cerraba el desfile, salió a las 21.00 horas y la primera tropa carthaginesa partió a las 18.30 horas.

Acrobacias y malabarismos
Este año, en la cabeza de la comitiva no iba la caravana publicitaria de otros años, que hacía más largo el desfile. Pronto, en las primeras tropas carthaginesas, tras Quart Hadast y los Guerreros de Uxama, ya se dejaron ver los primeros figurantes que divertían al público con sus acrobacias. El público que se arremolinaba en la Plaza de España les aplaudió.

Más atrás, las tropas de Baal Hammon repartían vino, dulces y caramelos, lo mismo que muchas otras tropas y legiones que se repartían por el recorrido. Pero el espectáculo que más aplausos arrancó del público y el que más flases de turistas y cartageneros consiguió fue el de los caballos de cartón piedra. Cuatro figurantes armados con cabezas de esos animales arengaban a los asistentes. Fue la gran novedad del cortejo.

Á los veinticinco grupos púnicos les seguían las secciones romanas (este año 23). Pero antes un grupo de bailarinas, gladiadores, comefuegos y malabaristas compuesto por una treintena de figurantes pertenecientes al grupo teatral Ditirambo de Cartagena supieron ganarse al público con sus acrobacias y malabares de fuego.

En el centro de los romanos y delante de la carroza del general Publio Cornelio Escipión y su pareja festera, Emilia Paula, iba otro de los grupos teatrales que dieron espectacularidad al desfile. Éste estuvo compuesto por una docena de actores llegados de Rusia vestidos de gladiadores. Lucharon entre ellos con espadas y banderas e intercalaron actuaciones acrobáticas con fuego.

La cantera está asegurada
La cantera de Carthagineses y Romanos esta asegurada. Durante el desfile se pudo ver a muchos niños, desde bebés que dormían ajenos al ruido en sus carricoches adornados hasta los adolescentes que, igual montaban a caballo que tocaban el tambor.

Los pequeños que seguían el pasacalles hicieron sudar a los organizadores porque aprovechaban cualquier hueco para meterse en mitad del desfile. Y así entre vencedores y vencidos la comitiva llegó al campamento para disfrutar del último día de fiestas.

FUENTE: http://www.laverdad.es/murcia/v/20110925/cartagena/fuego-vencedores-vencidos-20110925.html