LOS
ANGELES.-
Dos
destacados
líderes de
la
comunidad
judía
criticaron
duramente
el viernes
el
controvertido
filme de
Mel Gibson,
"La Pasión
de
Cristo,"
al decir
que la
película
acusa a
los judíos
por la
muerte de
Jesús y
podría
causar "un
daño
tremendo."
Uno de
los
líderes,
el jefe de
la
estadounidense
Liga
Contra la
Difamación
Abraham
Foxman,
tuvo que
entrar a
hurtadillas
para ver
el filme
en una
presentación
para
sacerdotes
cristianos.
El
otro, el
rabino
Marvin
Hier
-fundador
del Centro
Simon
Wiesenthal
en Los
Angeles-
dijo que
vio el
filme
gracias a
que se lo
mostró un
amigo que
prefería
mantenerse
en el
anonimato.
Gibson
ha
exhibido
hasta
ahora la
película
sólo ante
audiencias
selectas,
pero el 25
de febrero
se podrá
ver en
2.000
cines.
Las dos
versiones
fueron
ligeramente
distintas,
pues
Foxman
dijo que
la que vio
él
contenía
el
controvertido
pasaje de
Mateo en
el que el
sumo
sacerdote
judío
Caifás
declara:
"Que su
sangre
caiga
sobre
nosotros y
sobre
nuestros
hijos,"
una
maldición
que
durante
siglos se
usó para
acusar de
deicidio a
los
judíos.
Un
portavoz
de Gibson,
quien ha
enfrentado
críticas
de algunos
grupos
judíos por
su
película,
dijo que
una
versión
final del
filme
todavía no
se había
hecho.
También
dijo que
los dos
líderes
judíos
tenían
derecho a
opinar y
señaló que
Gibson ha
dicho que
nunca fue
su
intención
hacer una
película
antisemita.
El
rabino
Hier dijo:
"Puedo
decirles
que este
es un
filme
terrible,
un retrato
terrible
de los
judíos, y
causará un
daño
tremendo y
será un
placer
para todos
los
enemigos
del pueblo
judío."
"El
filme
muestra a
los judíos
de la peor
forma
posible.
Los judíos
no sólo
son
contrastados
en forma
negativa
con los
nuevos
judíos,
los
cristianos,
sino
también
contra la
jerarquía
romana,"
dijo Hier
a Reuters.
Hier
dijo que
objetaba
las
imágenes
físicas de
los judíos
en la
película,
al decir:
"Me
molestó su
aspecto
maligno.
Sus caras
siniestras.
Todos
ellos
parecen
rasputines
de ojos
oscuros y
sus caras
están en
fuerte
contraste
con las
maravillosas
expresiones
en las
caras de
los judíos
cristianos."
Foxman
dijo que
presenció
una
exhibición
del filme
en un
encuentro
cristiano
en el
estado de
Florida, y
agregó que
"(...) lo
triste es
que este
filme fue
hecho por
un hombre
que se
declara a
sí mismo
como un
hombre de
Dios y de
la verdad,
pero él
está
predeterminando
quién
puede ver
el filme."
Foxman
añadió:
"El filme
es el peor
posible.
Retrata a
los judíos
como
sedientos
de sangre
(...) él
toma cada
oportunidad
para
(acusar) a
los judíos
(...) lo
que lo
vuelve
peligroso
es que él
es un
genio de
su arte, y
al hacerlo
tan
doloroso
aumenta la
catársis y
la furia
(...) El
Vaticano
puede
haber
absuelto a
los
judíos,
pero no el
señor
Gibson."
Elan
Steinberg,
un
representante
del
Congreso
Judío
Mundial,
dijo que
se
preguntaba
si las
críticas
judías al
filme
podrían
ser
contraproducentes.
Al
referirse
al hecho
de que la
película
está en
arameo,
hebreo y
latín,
dijo,
"Después
de todo,
en los
últimos 50
años nunca
se ha
visto que
un filme
en arameo
gane un
Oscar."