Segovia EFE 30/07/2005
La campaña de excavaciones arqueológicas que la Universidad Sek de Segovia realiza este verano en Coca ha sacado a la luz la traza de una habitación absidada completa de lo que pudo ser un amplio complejo residencial romano, de finales del siglo I después de Cristo.
El director de las excavaciones y vicerrector de la universidad privada, Cesáreo Pérez, aseguró ayer a Efe que los trabajos continuarán el próximo mes de septiembre, hasta que quede al descubierto la planta completa, de unos 84 metros cuadrados, con un perfil conformado por los restos de muros, de hasta 1,20 metros de ancho.
Para Cesáreo Pérez, se han descubierto muchas habitaciones de este tipo en villas romanas, pero la de Coca es casi exclusiva debido a su magnitud y al volumen de sus muros, planteándose la posibilidad incluso de que pudo tratarse de un edificio de dos pisos, que se comenzó a construir en la época Flavia.
El vicerrector dijo que, posiblemente, no existe en Castilla y León un conjunto similar al de Coca, al que se podría comparar con Clunia, incluso no se descarta que haya una vía romana de unión entre Segovia y Coca, teniendo en cuenta que hasta allí se transportaron materiales que no existían en la zona, como mármoles. Estos elementos de construcción eran escasos en las villas residenciales hispanas y constituyen un elemento diferenciador y de prestigio.
Tras considerar que podría tratarse de uno de los conjuntos arquitectónicos romanos más importantes de la península ibérica, Pérez González indicó que aún es complicado determinar la función que pudo cumplir, aunque siempre se le ha vinculado a la familia del emperador Teodosio.
La arqueóloga que sigue los trabajos, Olivia Reyes, mantiene inicialmente que la habitación pudo ser una estancia de representación dentro del complejo, lo que le lleva a deducir que pudiera un edificio de carácter público.
Durante las excavaciones también ha quedado al descubierto una necrópolis tardorromana, en torno al siglo V, posterior a la construcción principal, ya que los enterramientos están enclavados en el exterior de los muros y, en algunas ocasiones, se han empleado materiales que formaron parte del inmueble, como mármoles.