Claudia Sánchez |Jaén www.diariojaen.es 13/01/2010
No sólo los aceituneros buscan el sol en Jaén. Hay otros profesionales que esperan que cesen las lluvias y los barrizales remitan para continuar su labor, son los arqueólogos.
Los responsables de excavaciones no quieren ni pensar en como se encontrarán los yacimientos arqueológicos después de los temporales. Aunque muchos hallazgos ya se encuentran a buen recaudo en los museos. Se descubren entornos nuevos con yacimientos sin estudiar aún y se encuentran piezas significativas en el último decenio, catalogadas en la época y la cultura romana, de esa Hispania que tenía en la Bética, a Cástulo como una importante ciudad, con riqueza minera y agrícola. El arqueólogo y profesor de la Universidad de Jaén, Arturo Ruiz, señala que en la época romana el dinamismo económico y cultural existente durante la presencia íbera, se desplaza hacia Córdoba y Sevilla y se produce cierta decadencia en Jaén. No obstante resalta un triángulo clave: Cástulo (Linares), Obulco (Porcuna) y Auringis (Jaén) que puede servir para valorar el impacto de los romanos en la provincia.
Así, en la villa romana de Los Robles, localizada en Jaén capital, dentro de la zona arqueológica de Marroquíes Bajos, se encontraron hace unos años varias esculturas en mármol: una cabeza de mujer de tamaño natural; esculturas de Príapo y Diana y una Venus. La directora del Museo Provincial, Francisca Hornos califica este conjunto escultórico “de especial importancia”. La Venus tras una limpieza de urgencia, realización de un molde por parte de la Escuela de Arte José Nogué y otras tareas de conservación, se encuentra en el Espacio Dedicado del Museo hasta el 26 de enero. Los demás hallazgos están expuestos en la correspondiente vitrina de Romanos. Hornos, asegura: “Hallazgos hay todos los días, aunque ahora por las zonas que se están excavando se descubren más piezas del Islam o de la prehistoria”. En el cortijo de Robles aparecieron también otras esculturas en caliza, monedas, vídrios y cerámicas. Las esculturas estuvieron ubicadas alrededor de una piscina, dentro de un patio del siglo II porticado decorado con estuco y pavimentado con mosaicos de motivos geométricos. La zona denota que ese espacio fue abandonado varios siglos después a causa de una violenta destrucción.
Justamente, el director del Centro de Interpretación y Museo Municipal del Palacio Abacial de Alcalá la Real, Carlos Borras, advierte sobre el deterioro de las piezas y casas encontradas, e insiste: “Lo importante no es las piezas que han aparecido sino la destrucción alevosa que se produjo”, En el Palacio Abacial de Alcalá también se protege y expone, en la vitrina del mes, la cabeza del fauno, encontrada hace un par de años en la Pensión Facundo. Este fauno, junto a un nuevo Hércules con el cancerbero, son los últimos hallazgos de las excavaciones arqueológicas realizadas por el Ayuntamiento alcalaíno en la Tejuela. La cabeza de Fauno o Sileno es de mármol amarillento y rosáceo, estuvo adornada por una corona de hojas de hiedra. Y posiblemente ornamentara el patio o jardín interior de una casa romana. Mientras que otra escultura encontrada, elaborada en piedra franca, representa el triunfo de Hércules al finalizar su último trabajo, por eso están con el perro Cerbero que guarda las puertas del reino de Plutón. Borrás considera que la mutilación de la imagen podría estar en relación con algún movimiento iconoclasta que tuviera lugar debido a la oficialización del cristianismo decretada por Constantino o por Teodosio. Según Borrás hubo un movimiento muy rigorista y los romanos fueron muy perseguidos, quizás un templo dedicado a Hércules en Alcalá lo arrasaron totalmente, y rompieron las estatuas y columnas. “Algo parecido a lo que hicieron los talibanes con los budas en Afganistan”, compara este director y experto arqueólogo.
“Toda excavación siempre es interesantísima, y aunque no se encuentren esculturas, da una información muy válida”, manifiesta Daniel Campos, concejal de Patrimonio del Ayuntamiento de Linares. Campos informa de como en Cástulo al excavar la zona norte de la muralla se hizo una consolidación de las Termas Romanas y el Hipocastum. Destaca, este edil especializado en Arqueología, que es una zona del siglo III y IV después de Cristo y que se hizo un geo-radar completo o prospección eléctrica de ese espacio. Actualmente este enclave arqueológico está adscrito a la Red Andaluza de Espacios Culturales y la Junta de Andalucía es la propietaria; el Ayuntamiento de Linares firmó en 2008 un protocolo con ella y ahora está en trámite un convenio a tres bandas, al que se uniría la Diputación Provincial. Pues todos los trabajos arqueológicos necesitan permisos, papeles e implicaciones institucionales. El turismo en este caso, también abrirá en primavera un Centro de Visitantes. Allí debió haber según Campos, un gran foro romano, casas imperiales y tres edificios basilicales. De Cástulo, el número cero de la Revista Musa refiere como en 2002 se encontraron dos deteriorados bustos de mujeres romanas en una cisterna.
De Cástulo, el arqueólogo Arturo Ruiz insiste en lo interesante de las intervenciones realizadas y destaca la importancia que tuvo para los romanos por ser una zona de gran riqueza minera; a ella se une el Centenillo cerca de La Carolina. Mientras que en Jaén capital, la vinculación con los romanos, está relacionada con la producción de aceite en las almazaras de Los Marroquíes Bajos. Por su parte a estas ciudades se une Porcuna, que es una zona interesante por la riqueza de cereal. Ruiz advierte: “La Calderona, un yacimiento a las afueras de la ciudad se va a expropiar y musealizar y será posiblemente en el futuro un referente de la presencia romana en Jaén. Y en cuarto lugar se podría ampliar el triángulo con Iliturgis, la actual Andújar, un referente en cuanto a la producción de cerámica tipo sigilata.