Xavier Antich www.caffereggio.net 09/07/2014

¿Qué queda de aquella experiencia de lo sublime en las palabras y el paisaje?

La historia de la lectura es una disciplina apasionante. A diferencia de la historia de los textos, centrada en la escritura, aquella permite acercarnos a la vida de los libros a través de sus lectores. Esos que Michel de Certeau veía “como viajeros que circulan por tierras ajenas, nómadas dedicados a la caza furtiva en campos que no han escrito”. Esta aproximación permite ver los libros bajo otra luz, distinta de la de sus autores. Libros fabulosos han esperado décadas, o siglos, para adquirir auténtica vida. Otros, reconocidos por la urgencia de un presente con poca perspectiva, pueden ser pronto olvidados, tal vez, lejos de la celebridad que los encumbró. Algunos tienen vida continuada en la lectura que no cesa; otros, vida intermitente. Algunos complacen sin cambiar nada de lo que encontraron, mientras que otros alteran el mundo con mayor impacto que algunas revoluciones.

Acantilado acaba de editar uno de estos libros con una historia asombrosa: De lo sublime, atribuido a un Longino del que casi nada se sabe, apenas que vivió en el siglo I. A pesar de su brevedad, trata de la capacidad de la oratoria para provocar efectos sobrecogedores a través de la palabra. Longino reclama discursos que, además de convencer, eleven el ánimo, disponiendo a la mente para la grandeza del alma. Para ello, piensa, es preciso una concepción elevada de pensamientos, pasión vehemente e inspirada, dicción precisa, lenguaje pulido y dignidad en la composición. Es difícil no sentir nostalgia de todo ello.

Aparte del interés del texto, que es enorme, lo más relevante es que, tras siglos de olvido, el original griego fue redescubierto en Basilea en 1554 y pronto traducido al inglés por John Hall y al francés por Boileau en el siglo XVII. Solo entonces obtuvo reconocimiento público y una difusión absolutamente insólita, provocando un terremoto que marcó la cultura occidental hasta el siglo XIX. Lo sublime, convertido en síntoma de época, puso en crisis la idea de una belleza basada en el orden y la armonía, y sintonizó con el descubrimiento de paisajes despreciados hasta entonces: la naturaleza montañosa y agreste, así como los espacios indómitos, se convirtieron en la fuente de inmensas emociones estéticas. Toda la cultura visual europea se contagió de esta nueva sensibilidad: los cuadros se poblaron de tormentas y naufragios, cordilleras y nieblas. Y la naturaleza, precisamente cuando la física pretendía reducirla a su dimensión matemática, se volvió, en parte, misteriosa, como un hogar inhóspito y, sin embargo, peligrosamente atractivo.

Hoy, cuando parece que la pequeñez y la mezquindad vuelven a reinar sin competencia, ¿qué queda de aquella experiencia de lo sublime en las palabras y el paisaje? Tal vez solo la conciencia de que todo estaba en nosotros, como un producto de la subjetividad. Haber olvidado el cultivo de esta sensibilidad, ¿no es lo que en verdad hemos perdido?

(Publicado originalmente por Xavier Antich en La Vanguardia)

FUENTE: http://www.caffereggio.net/2014/07/09/textos-que-trastornan-de-xavier-antich-en-la-vanguardia/

 

 Longino
 De lo sublime

 ¿Qué hace de Homero, Platón o Safo autores inmortales? ¿No consistía su arte en la capacidad  de despertar en el lector los sentimientos más elevados? Éstas son algunas de las preguntas  que plantea De lo sublime, una obra capital de la preceptiva publicada en Roma en la primera  mitad del siglo I. Su influencia es apreciable en varios tratados de Séneca y, junto con la Poética  de Aristóteles, formó parte de la preceptiva al menos hasta el siglo X. En 1674 Boileau la tradujo,  rescatándola del olvido, y desde entonces—y a pesar de que se estima que las lagunas del  texto conservado en la actualidad representan más de una cuarta parte del original—De lo  sublime es una obra de referencia. 

Ed. Acantilado. Colección: Cuadernos del Acantilado, 63
 Traducción: Eduardo Gil Bera
 ISBN: 978-84-16011-14-8
 Páginas: 96. Precio: 10.00 €

Extracto del libro: http://www.acantilado.es/cont/catalogo/docsPot/Extracto_De_lo_sublime.pdf