Roma | EUROPA PRESS www.lavanguardia.com 29/11/2012

Se mantendrá al público lejos del anfiteatro ante el riesgo de derrumbes, aunque se podrá continuar accediendo al monumento.

El famoso Coliseo de Roma será rodeado por unas cadenas sujetas a unas pequeñas columnas de hierro para mantener al público alejado del anfiteatro al tiempo que se evita daño por caída de fragmentos en los transeúntes, según informa el diario italiano Il Corriere Della Sera.

El área de seguridad necesaria ante el riesgo de pequeños derrumbes fue confirmada este martes por la directora regional para el patrimonio cultural del Lazio, Federica Galloni. La denominada «zona roja» se anunció a finales de septiembre tras la caída de los últimos ladrillos. Los signos más preocupantes de hundimiento de uno de los monumentos más visitados del mundo se registraron en diciembre del año pasado, cuando se produjo la caída de un fragmento de toba, y en febrero de 2012 cuando por las nieves y heladas fue cerrado por seguridad.

Garantizar la seguridad
La valla de protección consistirá en unas pequeñas columnas unidas entre ellas por unas cadenas a distancias diferentes, en la parte más alta a 15 metros, mientras que en las partes más bajas a seis u ocho metros. El Coliseo, por lo tanto, estará protegido por una banda de «intransitable» destinada a «garantizar la seguridad pública».

Los turistas aún pueden continuar teniendo acceso al monumento a través de los torniquetes de entrada. Aún no está claro si esta zona y la correspondiente a la salida de visitantes también estarán protegidas por estos cobertizos anti escombros. «Los cargos públicos debemos intervenir, por razón de seguridad, apenas se manifiesta el problema», explicó la superintendente especial para los bienes arqueológicos de Roma Maria Rosaria Barbera.

Una normativa recientemente aprobada por el alcalde de Roma, Gianni Alemanno, rebajará de 16 a ocho los puestos ambulantes de venta de comida y bebida que habitualmente rodean el monumento.

25 millones para su restauración
En julio pasado fue anunciado que los trabajos de restauración del Coliseo de Roma, que permitirán reforzar su estructura y mostrar a los turistas un 25% más de su superficie, comenzarían a principios de diciembre. Las obras cuentan con una financiación de unos 25 millones de euros (30,7 millones de dólares) realizada por el empresario Diego Della Valle, propietario de la marca de zapatos y artículos de cuero Tod’s.

La restauración del anfiteatro, que no impedirá que el monumento se mantenga abierto al público, prevé que se levanten andamios sobre las primeras cuatro arcadas del monumento durante 915 días lo que hace que los trabajos de restauración se prolonguen durante unos dos años y medio.

La remodelación que está por comenzar incluye un nuevo sistema de iluminación y el traslado de los servicios de taquillas, baños, cafetería y librería. Estas instalaciones se encuentran ahora en el interior del Coliseo y tras las reformas funcionarán afuera, en una zona de 1.600 metros cuadrados.

El anfiteatro Flavio o Coliseo, fue levantado entre los años 72 y 80 d.C. y podía albergar hasta 50.000 espectadores durante los juegos de gladiadores y de fieras que se llevaban a cabo en su interior. La inauguración fue celebrada con 100 días y 100 noches de juegos en los que se mataron más de 5.000 animales. Se extiende sobre 3.500 metros cuadrados de superficie en el corazón del centro romano, en el límite oriental del Foro Romano y a unos 400 metros del Circo Romano.

FUENTE: http://www.lavanguardia.com/viajes/20121129/54355943534/roma-vallara-coliseo-razones-seguridad.html