Juanjo Payá www.diarioinformacion.com 27/12/2010
El arqueólogo alicantino José Uroz denuncia la escasa inversión del Gobierno de Berlusconi en la conocida ciudad romana tras el derribo de varias murallas.
Pompeya se cae a trozos o, al menos, esa es la sensación que nos queda después del derrumbamiento de varias murallas de la célebre ciudad romana en las últimas semanas. La respuesta inmediata, por parte de las autoridades italianas, fue las intensas lluvias que asolaron la zona un día tras otro. Sin embargo, varias voces expertas en este centro arqueológico mundial pusieron en entredicho estas «excusas», apuntando a su vez a otros frentes en los que se mezcla la política con un vertedero de basuras como telón de fondo.
Una de estas versiones es la del arqueólogo alicantino José Uroz, quien lleva muchos años al frente de un proyecto de investigación en una de las zonas de Pompeya en la que participan la Universidad de Alicante junto al Ministerio de Cultura. Pues bien, Uroz, sin pelos en la lengua, denuncia la metedura de una «mano negra y oculta» en Pompeya que ha provocado todos estos derrumbes sospechosos. «La prensa italiana habla del intento de instalar un vertedero de basuras en los alrededores de la ciudad romana, que de momento no lo han conseguido poner. Y a mí todo esto es algo que me da qué pensar, la verdad, porque hay muros que han caído y no tendrían que haber caído. Son cosas muy extrañas», afirma el investigador. De este modo, Uroz centraliza sus críticas en la gestión cultural del Gobierno de Berlusconi, «que ya intentó privatizar Pompeya y tampoco lo consiguió».
Y es por todos estos motivos por los que, según cree Uroz, Berlusconi está «presionando» Pompeya al no aportarle prácticamente financiación e inversión alguna, «lo que impide que no se realicen consolidación de las estructuras y eso, junto al paso de los turistas (más de tres millones al año) y del mismo tiempo, origine la caída de todos estos muros».
Y entonces… ¿Fue la lluvia, como se anunció en un primer instante, la verdadera culpable de esta catástrofe en Pompeya? José Uroz admite la intensidad de la lluvia por esos días en el yacimiento arqueológico, pero cree que el problema va más allá, en una «cuestión política» en la que existe una difícil solución «mientras Berlusconi siga en el poder».
«El remedio no consiste en la reducción del paso de turistas por la zona, porque el turismo es riqueza. Lo que se necesitaría es un replanteamiento de lo que se está haciendo en Pompeya, pero con tipos con la moral como éste (en alusión a Berlusconi) veo muy pocas soluciones a la vista».
«Vamos a esperar a lo que diga la Unesco»
El arqueólogo alicantino José Uroz afirmó que están a la espera de la investigación de la Unesco sobre el derrumbe de los muros en la Casa del Moralista y de la zona de los gladiadores en Pompeya «para ver si tenemos que echar una ayuda». Con todo, Uroz está muy satisfecho ya que «las lluvias no han afectado a nuestros trabajos en Pompeya», que casualmente este año contaron con una consolidación de las paredes. Con todo, si no falla nada, en verano del 2011 volverán para continuar con sus trabajos.