MADRID.
Después
de su
estreno
en
Epidauro,
en
Grecia,
y en
el
Festival
de
Teatro
de Mérida,
le
toca
ahora
el
turno
al
Festival
de
Otoño
quien
a
partir
de
hoy y
hasta
el 2
de
noviembre
representará
en el
Teatro
Madrid
la
obra
«Pentesiela»,
en
una
adaptación
realizada
por
el
prestigioso
director
europeo
Peter
Stein
sobre
el
texto
original
del
alemán
Heinrich
von
Kleist.
Peter
Stein
confesaba
ayer
su
entusiasmo
por
este
texto
que
«tenía
en
mente
desde
hace
tres
años».
Ha
sido
en la
presente
temporada
cuando
se ha
podido
hacer
realidad
el
proyecto
gracias
a la
confluencia
de
los
intereses
de
varios
países
-Grecia,
Italia,
España
y
Austria-
y al
hecho
de
que
su
mujer,
la
actriz
Maddalena
Crippa,
mostrara
también
un
inmenso
deseo
por
interpretar
este
personaje
mítico.
«Es
un
texto
que
necesitaba
una
gran
adaptación
porque
dramatúrgicamente
es
muy
complicada»,
asegura
Stein.
Los
60
folios
escritos
por
Kleist
como
introducción
a los
personajes
mitólogicos,
el
director
alemán
los
ha
sustituido
«por
un
coro
de
amazonas
que
se
encarga
de
representar
en
mimo
ese
texto
hablado»
y que
se
convierte
a su
vez
en un
«elemento
provocador
ya
que
su
comportamiento
es
muy
distinto
al de
el
resto
de
las
mujeres:
cantan,
hablan,
bailan,
luchan...».
Para
Stein
la
intención
de
Kleist
era
«contar
el
peligro
y la
confusión
del
alma
frente
al
amor
erótico
o la
obsesión
sentimental
hacia
una
persona».
Sobre
este
eje,
Stein
ha
vertido
su
propia
visión,
más
moderna,
incluyendo
algunas
relecturas
freudianas,
ausentes
por
supuesto
en la
«Pentesilea»
de
Kleist,
al
estar
escrita
en
1808.
En
la
obra
se
enfrentan
dos
sociedades
en
principio
antagónicas:
la de
las
amazonas
que
adoptan
la
conducta
de
los
hombres
y
fruto
de
sus
batallas
hace
prisioneros
con
los
que
organizan
orgía;
y el
mito
griego,
en el
que
las
mujeres
son
las
realmente
conquistadas.
Esta
disparidad
produce
una
gran
confusión
sobre
Pentesilea,
personaje
que
interpreta
Maddalena
Crippa,
quien
se
confesaba
cautivada
por
la
belleza
y la
intensidad
del
texto».«Interpretarlo
bajo
la
dirección
de
Peter
ha
sido
un
sueño
realizado»,
confiesa
la
actriz.
«Pentesilea
es un
personaje
extremo
con
manifestaciones
-amor,
dolor,
pasión-
irrefrenables.
Para
mí
es un
privilegio
vivir
estas
sensaciones
en
una
sociedad
moderna
en la
que
está
prohibido
sentimientos
tan
explícitos
porque
llevan
al
desastre».
El
deselance
de la
obra,
en el
que
Pentesilea
termina
asesinando
a
Aquiles
para
luego
devorarle,
lleva
a
afirmar
a
Crippa
que
se
trata
de un
texto
muy
actual
ya
que
«a
diario
se
puede
ver
en la
prensa
italiana
noticias
que
hablan
de
hombres
que
matan
a sus
mujeres,
y al
contrario;
y
sobre
hijos
que
asesinan
a sus
padres,
actos
que
son
la
consecuencia
un
sentimiento
muy
fuerte
que
al
final
se ha
torcido».
Traer
este
montaje
al
Festival
de
Otoño
ha
supueto
para
Peter
Stein
un
gran
esfuerzo
pues
ha
tenido
que
«volver
a
empezar»
ya
que
su
concepción
de la
obra
para
un
espacio
abierto
como
era Mérida
difiere
mucho
de
uno
cerrado
como
el
Teatro
Madrid.
Entre
los
cambios
que
ha
realizado
se
encuentra
la
reducción
del
coro
de
las
amazonas
-interpretadas
por
actores
de
varios
países
mediterráneos-
que
ha
pasado
de
treinta
a
doce.
Aunque
con
esto
ha
perdido
cierto
movimiento
el
director
asegura
que
el
trabajo
se ha
enriquecido
por
«una
mayor
profundidad
y
precisión
en la
recitación».
La
escenografía
también
ha
variado
considerablemente
con
la
incorporación
de «una
caja
de
terciopelo
negro
con
tres
puertas
iluminadas
que
ofrecen
un
aspecto
más
abstracto
y
concentrado».
Frente
a la
espectacularidad
de Mérida,
Peter
Stein
subraya
que
aquí
ha
apostado
aquí
por
«una
mayor
intensidad
de la
recitación
del
texto».