Levante Digital, 5 de septiembre de 2001

El TSJ dirá en tres semanas si paraliza las obras de la autovía de La Plana

Nacho Martín, Castelló

La sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana anunciará en el plazo de dos semanas si admite a trámite el recurso contra el trazado de la autovía Borriol-La Pobla. La plataforma en Defensa de la Vía Augusta presentó ayer el anuncio previo a este recurso, que se dirige contra la Conselleria de Obras Públicas y pide la suspensión cautelar de las obras. Argumentan que este vial puede ocasionar un daño irreversible al patrimonio cultural.

El representante legal de la plataforma, Juan Carlos Insa, explicó que en el caso de aceptar a trámite el recurso, el tribunal dispone de un plazo de diez días para celebrar la vista previa. En ella, ambas partes expondrán sus argumentos ante los magistrados.

Tras la vista preliminar, será suficiente un plazo de tres o cuatro días para conocer si el tribunal ha decidido suspender, como medida cautelar, la ejecución de la carretera.

Vecinos, ecologistas, historiadores y oposición han denunciado que este vial cubrirá de asfalto 2,5 kilómetros de la Vía Augusta -del año 8 a.C.- y convertirá seis kilómetros de este patrimonio histórico en una vía de servicios. Sus argumentos son diversos.

En el plano jurídico, la plataforma dejará sobre la mesa la Ley del Patrimonio Cultural Valenciano 4/98. Esta ley, en su artículo 9, indica textualmente que los poderes públicos «garantizan la protección, conservación y acrecentamiento del patrimonio cultural valenciano».

Si atendemos a su artículo 10, «la Conselleria de Cultura, Educación y Ciencia suspenderá cautelarmente cualquier intervención en bienes muebles o inmuebles que posean alguno de los valores mencionados en el artículo 1.2 de esta ley cuando estime que la intervención pone en peligro dichos valores».

Otro de sus razonamientos se basa en las características del propio proyecto. Subrayan que el informe de impacto ambiental existente data de 1994 y el proyecto «ha experimentado cambios sustanciales».

Tal como denunció el PSPV, en los planos sobre los cuales se aprobó el informe de impacto ambiental, «el vial abarcaba entre ocho y diez metros desde el borde de la carretera, lo cual no afectaba a la Vía Augusta».

No obstante, en 1998 y en 2000 el trazado «se ha ampliado a 18 metros». Este incremento «equivaldría a un ochenta por ciento más de impacto».