Roma | EFE 27/01/2011

La Casa de las Vestales, llamada así por ser la sede del colegio de las sacerdotisas que antiguamente rendían culto a Vesta (diosa romana del hogar), ha vuelto a abrir sus puertas al público hoy, después de varios trabajos de restauración.

Este espacio arqueológico llevaba cerrado al público más de veinte años y ahora podrá ser visitado junto a los demás restos arqueológicos de los foros romanos, que constituían el eje central en torno al que se desarrolló la ciudad de Roma.

En ellos, se desarrollaba la mayor parte de la actividad comercial, política y social de Roma, ya que albergaban negocios, lugares dedicados a la religión y la administración de justicia, entre otras actividades urbanitas.

La Casa de las Vestales, que se encuentra en la Vía Sacra que comunica los Foros Imperiales con el Coliseo, está considerado uno de los lugares más sagrados y simbólicos de la Roma Antigua, ya que en sus orígenes estaba formado por un templo y un atrio repleto de pórticos.

Aunque tras los trabajos de recuperación sendas áreas quedan perfectamente diferenciadas, la restauración se ha centrado principalmente en el espacio abierto, en el que se han plantado numerosos arbustos y césped natural.

Además, las dos pilas centrales del monumento original se han llenado de agua y se han rodeado de flores rosas, mientras que las estatuas de las sacerdotisas continúan rodeando el patio, en su mayoría sin algún miembro del cuerpo. En cuanto al templo religioso, se ha logrado mantener parte de su estructura.

Esta reconstrucción de la Casa de las Vestales, según el subsecretario de los Bienes Culturales de Roma, Francesco Maria Giro, es sólo el primero de una serie de pasos con los que la Ciudad Eterna pretende realzar uno de los monumentos más visitados de Roma: los Foros Imperiales.

«Se trata de un gran relanzamiento de la arqueología romana, que proseguirá con la reapertura de la Iglesia de Santa María Antigua, restaurada con fondos americanos, y con la reapertura de la «Rampa de Domiziano», afirmó hoy durante la rueda de prensa de la inauguración de la Casa de las Vestales.

También en los próximos meses se podrá volver a ver la «Fuente de Giuturna», un lugar dedicado a los ritos del agua, y admirar la restauración del «Templo de los Castori».