Roma / ANSA 05/12/2005

Una selección de 500 objetos, entre estatuas, pinturas y adornos de una mansión imperial romana del siglo I, descubiertos durante las excavaciones para construir un estacionamiento para el Jubileo del 2000 cerca del Vaticano, serán expuestos por primera vez a partir del 17 de diciembre en el Palacio Altemps, uno de los tres museos de la Antigüedad de la capital italiana.

Roma / ANSA 05/12/2005

Una selección de 500 objetos, entre estatuas, pinturas y adornos de una mansión imperial romana del siglo I, descubiertos durante las excavaciones para construir un estacionamiento para el Jubileo del 2000 cerca del Vaticano, serán expuestos por primera vez a partir del 17 de diciembre en el Palacio Altemps, uno de los tres museos de la Antigüedad de la capital italiana.

El parque de estacionamiento se construyó en 1999 con vistas al Jubileo del 2000, y cuando las excavadoras se toparon con los restos de una mansión imperial, probablemente la casa de Agripina Mayor (14 a.C.-33 d.C), sobrina de Augusto y madre del futuro emperador Calígula, hubo un movimiento de opinión entre los arqueólogos para suspender los trabajos y destinar la zona a un museo al aire libre.

Pero las autoridades vaticanas, que querían a toda costa el estacionamiento (se llegó a llamarlo "el estacionamiento de Dios"), se opusieron y encontraron la connivencia de la municipalidad de Roma, a quien pertenecía el terreno, que rescató todo lo posible de la mansión y autorizó la prosecución de las obras de demolición.

Así, para construir un parque de estacionamiento que hoy casi nadie usa, desapareció uno de los más interesantes testimonios de un período fundamental para la historia de la Roma antigua.

Lo que se pudo salvar será expuesto durante cuatro meses, desde el 17 de diciembre al 16 de abril, en el Palacio Altemps, a dos pasos de la céntrica Plaza Navona.

Los colores de la fastuosidad. Los mármoles de la Domus "Imperial del Janícolo", se llama esta exposición en la que por primera vez se podrán admirar frescos de una belleza y una simplicidad casi perfectas, una estatua de Afrodita y capiteles varios, todos debidamente restaurados.

Una de las curiosidades de la mansión es que servía como depósito provisorio de materiales de construcción y decoración, y en un cuarto se encontraron acumuladas estatuas, mármoles preciosos, columnas y frisos más antiguos que hubieran debido servir como adorno para nuevos ambientes de la casa o de otra de propiedad del mismo dueño.

Son justamente los mármoles de colores (una manía de las familias romanas ricas, que se hacían traer de todo el Mediterráneo las placas multicolores, algunas de las cuales cambiaban de tonalidad según la luz del día o de las antorchas de la noche) los que más atraerán a los amantes del arte.

La blancura de las estatuas antiguas (que en realidad estaban todas pintadas, sólo que con el pasar de los siglos el color ha desaparecido casi por completo) hizo olvidar la obsesión de la Antigüedad por las variedades cromáticas.

Ahora, esta fastuosidad del color será la protagonista de la exposición y sobre todo la del patio central de palacio Altemps, donde se exhibirán los frescos y una selección de las placas de mármoles de colores.

Entre ellos hay una serie de capiteles rojo pompeyano con incrustaciones de piedras preciosas, y otros blancos con delfines que se mezclan con las típicas hojas de acanto del estilo corintio, ambos de una novedad absoluta para el ojo contemporáneo.

Aunque no todos los estudiosos del arte antiguo están de acuerdo en considerar la mansión sepultada debajo del estacionamiento como propiedad de Agripina Mayor, se sabe gracias a los testimonios de los escritores de la época (como Séneca y Filón) que la zona del Janícolo, hoy sepultada bajo toneladas de tierra y de cimientos de casas modernas, estaba habitada por las familias más importantes del Imperio.

Sólo más tarde estas familias seguirían al emperador Augusto y se mudarían a otras zonas de la ciudad como el Palatino o el Monte Celio.

Lo mejor de las 500 obras expuestas serán luego incorporadas al material de los Palacios Altemps y Máximo en las Termas, que en espera de la llegada inminente de la famosa colección Torlonia, todavía en tratativas de compra de parte de la municipalidad, se transformará en ese gran Museo de la Antigüedad Romana que Italia espera desde hace más de un siglo.

ENLACES: Museo Nazionale Romano. Palazzo Altemps http://www.archeorm.arti.beniculturali.it/sar2000/Altemps/Pal_altemps.asp