Juan Soriano | Mérida www.hoy.es 05/02/2011
A falta de pequeños remates, ya se puede contemplar el resultado del proyecto de adecuación de una nueva plaza pública. Cultura recepciona los trabajos, tras lo que se espera la inauguración del recinto este mes.
La obra ya ha terminado, pero aún habrá que esperar unos días para poder apreciar su resultado. La Consejería de Cultura de la Junta de Extremadura firmó ayer la recepción del proyecto de construcción de una plaza pública en el entorno del Templo de Diana. A falta de rematar algunos detalles, se espera que la actuación se pueda inaugurar y abrir al público a mediados de este mes.
Los operarios ya se echaron en falta en la mañana de ayer, que se dedicó prácticamente por completo al acto de recepción. Técnicos de la Consejería de Cultura, junto a responsables del Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida, acudieron al lugar en compañía de representantes de las empresas constructoras y del arquitecto del proyecto, José María Sánchez.
Los trabajos han concluido con la colocación de la iluminación artística en el perímetro del monumento y con la instalación de un nuevo pavimento con ‘aripaq’, un material mezcla de arena y resina que ofrece un resultado similar al albero pero más consistente. Aún quedan cuestiones por terminar, como prolongar y pintar el vallado que protege los restos situados junto a la calle Romero Leal.
A la espera de rematar estas mejoras, la obra ya se puede dar por terminada tras el acto de recepción que se llevó a cabo ayer. Sin embargo, aún no hay una fecha para proceder a la inauguración de la obra y abrir al uso público la nueva plaza. Aunque, a juzgar por la escasa importancia de los trabajos pendientes (aunque también hay que contar con la nueva panelería que instalará el Consorcio), se estima que el nuevo entorno del Templo de Diana se pueda poner a disposición de los emeritenses este mes.
26 meses de obras
Las obras comenzaron a finales de 2008 con un plazo de ejecución previsto de 19 meses. Una serie de modificaciones al proyecto han condicionado la marcha de los trabajos, lo que explica el retraso de más de seis meses. La Unión Temporal de Empresas formada por Copcisa y Procondal fue la adjudicataria de la actuación por 2,99 millones de euros.
Principalmente, los trabajos han consistido en la construcción de un edificio para tapar las medianeras que afeaban la vista del monumento. También se ha limpiado los restos arqueológicos, se ha instalado nueva iluminación y se ha adecuado el entorno del templo para que pueda ser transitable. El resultado es la recuperación del principal espacio público de la colonia Augusta Emérita.
Sin embargo, aún hay cuestiones importantes por terminar. En primer lugar, la actuación se ha limitado a la obra civil. El nuevo edificio perimetral ya está construido, pero los locales que se han generado se encuentran en bruto, de modo que su ocupación efectiva aún tardará varios meses en llegar.
Pero, sobre todo, la principal medida que falta por ejecutar será la intervención en el propio Templo de Diana. El proyecto no contemplaba intervenir en el monumento. Sin embargo, a mediados de 2009 se decidió rectificar la actuación para adaptarla a la aparición de nuevos restos. Entonces, se planteó eliminar la planta inferior del edificio perimetral, que se iba a destinar a fines comerciales y que se ha sustituido por un paseo porticado. En su lugar, se propuso la adecuación de un centro de interpretación en el interior del templo.
Finalmente, esta intervención no se ha podido llevar a cabo, por lo que habrá que aguardar a una segunda fase para que se pueda hacer visitable el interior del monumento que da sentido a la nueva plaza pública.