Peñalba de Castro (Burgos) www.diariodeburgos.es 17/09/2010

Remates. La intervención arqueológica en la zona de la escena está prácticamente concluida y solo quedaría la instalación de una superficie donde poder actuar.

Las representaciones artísticas volverán al teatro romano de Clunia en 2011. Ese es, al menos, el plazo que maneja la Diputación y que confirmaron ayer los codirectores del yacimiento, Francesc Tuset y Miguel Ángel de la Iglesia, durante la visita que se realizó a las ruinas de la ciudad romana, en la que participaron el presidente de la Corporación Provincial, Vicente Orden Vigara, la subdelegada del Gobierno, Berta Tricio, y el delegado de la Junta, Jaime Mateu.

Tuset informó de que, en la actualidad, la intervención arqueológica en la zona de la escena está prácticamente finalizada, a falta de realizar, probablemente en la próxima campaña, estudios sobre unas estructuras realizadas hacia la segunda mitad del siglo II, cuando el teatro se transformó en anfiteatro y las representaciones escénicas dejaron paso a juegos de arena y espectáculos más físicos. De esta manera, estaría a falta únicamente de instalar una especie de tablado sobre el que se puedan realizar las escenificaciones.

Precisamente, la intervención en esta zona está previsto completarla con la ejecución el año que viene de un anticuario en el que exponer parte del numeroso material hallado en las sucesivas excavaciones y que sirva como inicio de la visita. Algo para lo que, apuntó De la Iglesia, se espera contar con el respaldo del Gobierno central mediante la aportación del 1% Cultural.

De forma paralela, se está ultimando la ejecución del acondicionamiento del recinto con el aprovechamiento de la cávea baja para albergar a un millar de espectadores, mediante la instalación de un graderío a base de traviesas de madera y tierra vegetal y la colocación de una pasarela de madera semicircular y un banco delimitador que precise el contorno superior de la construcción, permita visitar todo el recinto sin necesidad de pisar los restos originales y oculte un sistema de drenaje para evitar que las aguas de lluvias bajen por el teatro, acrecentando su posible deterioro.

Esta intervención ha supuesto un gasto de algo más de 875.000 euros financiados en un 70% gracias a la concesión del 1% Cultural del Ministerio de Fomento en 2009, asumiendo el resto la propia Diputación.

De todas maneras, insistieron los codirectores, a día de hoy apenas se ha descubierto en torno al cinco por ciento de un yacimiento que se extiende por una superficie de cerca de 130 hectáreas y, solo con lo que ya se conoce, se calcula que hay trabajo para las próximas dos ó tres décadas. «Con eso, el trabajo del arqueólogo está más que saturado. Ninguno de los que estamos aquí veremos el yacimiento acabado. Ni ninguno de nuestros biznietos», advirtió Francesc Tuset.

La presencia ayer de representantes de las Administraciones central, regional y provincial sirvió para poner de manifiesto la disposición de todas ellas a colaborar en la puesta en valor de los restos arqueológicos.

De hecho, se apuntó que en las intervenciones realizadas desde el año 1993, especialmente en la última década, han supuesto un gasto de 4,67 millones de euros. De ellos, la Junta de Castilla y León ha aportado más de un millón de euros y el Ejecutivo central otro medio, asumiendo el resto la Diputación Provincial. «Lo que se ha hecho es muchísimo pero lo que queda es infinito. De ahí que la colaboración entre administraciones sea clave porque la Diputación sola es prácticamente imposible que pueda atenderlo», aseveró Vigara.