Núria Riu | Tarragona www.diaridetarragona.com 28/05/2009
La ‘praefectura annonae’ fue el inicio de un Estado del bienestar que tenía como objetivo combatir las dificultades alimentarias del periodo romano.
El Imperio Romano asentó las bases de uno de los sistemas más ricos y poderosos de la historia. Sin embargo, los romanos también padecieron importantes crisis. Sus problemas no llegaron de manos del sector del ladrillo o por culpa de los bancos. Las malas cosechas, las constantes guerras y las dificultades de conservación y almacenaje de los alimentos provocaron importantes problemas de suministro.
El trigo, la cebada y el vino eran los productos básicos en la antigüedad. Desde los inicios se intentó diversificar las cosechas y también eran habituales los intercambios alimentarios. A pesar de ello, era necesaria una infraestructura de almacenaje que permitiese regular el suministro de alimentos, y el poder público decidió intervenir financiando un sistema de depósitos. Y es que, después de la conquista de Egipto, las arcas estatales se encontraban en un buen momento y, por otro lado, también empezaron a llegar los frutos del Nilo.
El erario público era el encargado de comprar los alimentos básicos, que eran repartidos de forma gratuita, o a unos precios muy económicos, a la sociedad civil de la época.
Augusto fue el primer emperador en introducir y gestionar la prefectura de la annona, un servicio público encargado de adquirir, transportar y almacenar los alimentos que posteriormente eran repartidos entre los ciudadanos.
La Associació Projecte Phoenix es el grupo de recreación que este año, y como novedad dentro del programa de Tarraco Viva, explica y representa el funcionamiento de este primer paso hacia el Estado del bienestar. El espectáculo ya se estrenó el pasado fin de semana en las dependencias del CaixaFòrum. Sin embargo, hoy y durante todo el fin de semana, podrá verse de nuevo en los Jardins del Camp de Mart.
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Hispania, granero de Roma, por José Remesal Rodríguez
