Estefanía Jiménez Solís | Mérida www.diariosigloxxi.com 26/06/2011
La ciudad alberga un curso en julio sobre la forma de vida en Roma.
No hace falta viajar a Roma para hacernos una idea de las dimensiones y grandiosidad de una ciudad romana. Tenemos en Mérida (Emérita Augusta cuando era capital de la provincia de Lusitania) un conjunto arquitectónico de visita obligada a lo largo de nuestra vida. Ahora, hay una excusa más para acercarse hasta el lugar, ya que la ciudad recupera durante el 7, 8 y 9 de julio la vida romana en las calles, casas, edificios públicos, espectáculos y tabernae (comercios).
El Museo Nacional de Arte Romano de Mérida celebra en esos días el curso Vivir en Roma, una actividad en la que, mediante expertos y actos lúdicos, se expondrá «una visión general de la vida cotidiana en una ciudad romana», aseguran los organizadores. Asimismo, no será un curso únicamente teórico, ya que los participantes podrán visitar monumentos como la presa romana de Proserpina y el Anfiteatro o celebrar una cena romana, además de asistir a conferencias y coloquios.
En las ponencias se hablará de distintos ámbitos, desde los yacimientos junto al río Guadiana hasta cómo era el sistema político. Para los menos estudiosos, pueden resultar más apetecibles otras conferencias como «Los banquetes romanos: ¿Orgías o actos sociales?» y «Los rostros de la gente de Roma. El retrato de nuestros antepasados».
Quien no pueda desplazarse en esas fechas a Mérida, siempre puede planear una escapada a alguno de los espectáculos que se organizan en el anfiteatro, el foro, el teatro romano o la alcazaba, por ejemplo. Así, el turista visita la ciudad mientras se hace una idea de cómo eran representadas las obras teatrales en la época en su marco original. En julio, hay representaciones como «El viaje de las heroidas» (danza), «La asamblea de mujeres» (teatro) o «Las termas de la risa» (infantil).
Otra posibilidad para conocer las riquezas históricas de esta ciudad es realizar una visita virtual, en la que se ofrecen textos explicativos y multitud de fotografías del Museo Nacional de Arte Romano de Mérida. No quedan, pues, excusas para no tener a Mérida en la lista de ciudades que visitar, aunque sea a través de Internet…y sin saber nada de latín.