EFE www.hoy.es 07/03/2008
El profesor López Moreda afirma que la mujer romana no tendría nada que envidiar de las mujeres actuales «La liberación de las mujeres se produjo en la época de Augusto».
El profesor de Historia de la Universidad de Extremadura (UEX) Santiago López Moreda afirmó ayer en Mérida, sobre la evolución de la situación de los derechos de las mujeres en el seno de la sociedad, que «la mujer actual no tiene nada que envidiarle a la del Imperio Romano, ni la del Imperio Romano a la actual».
López Moreda hizo esta afirmación antes de participar en el Ciclo de Conferencias ‘Ser mujer en Roma’, que celebra el Museo Nacional de Arte Romano (MNAR) emeritense con motivo de la celebración el próximo sábado, día 8, del Día Internacional de la Mujer, y en el que pronuncia la conferencia ‘Misoginia en la sociedad antigua: ¿mito o realidad?’.
Según este experto, en el mundo antiguo, al igual que sucede en la actualidad, hay «muchos elementos de misoginia, pero también de liberación de la mujer, sobre todo durante el Imperio Romano». Entre los elementos de misoginia en el mundo grecolatino, ha mencionado conceptos como que «las mujeres nacen de los animales y tienen poco de bueno», una situación negativa que comenzó a cambiar hacia el siglo III antes de Cristo y que era ya mejor aún durante la época imperial romana. En este sentido, en aquellos días las mujeres ya podían testar y divorciarse, la natalidad era menor y había más libertad para mantener relaciones amorosas, se trataba de mujeres «muy modernas».
Libertad
En cuanto a los posibles paralelismos entre el mundo romano y el actual, ha dicho que, por ejemplo, durante las primeras épocas de Roma la consideración de las mujeres era similar a la existente durante el franquismo y que «la mujer actual no tiene nada que envidiarle a la del Imperio, ni la del Imperio a la actual».
«La ruptura, la liberación definitiva viene sobre todo en la época de Augusto, aunque ya la literatura del siglo I es muy prolija en meterse contra las mujeres, especialmente en las sátiras, quizá por el exceso de liberación, desde el punto de vista del mundo romano».
ENLACES:
La mujer actual no tiene nada que envidiar a la de la antigua Roma, según un profesor de Historia