José María Alegre | IES Profesor Hernández Pacheco | Cáceres arsdocendi.blogspot.com.es 07/06/2016
En la Resolución de 27 de mayo de 2016 de la Secretaría de Estado de Educación se le ha concedido el Premio Nacional al rendimiento académico del alumnado en Educación Secundaria Obligatoria a nuestro alumno Luis Merchán Pascual.
Luis es un alumno ejemplar. No ejemplar porque saque muy buenas notas, que también. Es un alumno ejemplar porque disfruta con lo que hace. Siempre se le ve feliz. Es ejemplar porque se lleva bien con sus compañeros, porque participa de todas las actividades del centro, porque aprecia a sus profesores, porque es sencillo y discreto. Es un alumno ejemplar y es de letras. Sí, es de letras.
Luis cursa la opción de Humanidades en Bachillerato. ¡No puede ser! ¡Debe haber un error! ¿Es esto posible? ¿Nadie ha llamado a este chico para orientarlo mejor? Supongo que lo habrán intentado, pero sí, es de letras.
Por eso también, por haber decidido de acuerdo con sus capacidades e intereses, a contracorriente, por haber optado por un camino tal vez menos fácil, pero directo hacia lo que a él le hace y hará feliz, Luis es un alumno ejemplar. Y además es listo, mira tú. ¿Qué dices? ¿Listo? ¡Imposible! ¡Si ha elegido letras! ¡Y Humanidades puras! Pues sí, Luis es listo, este chico sabe latines, como Mary Beard, premiada recientemente con el Princesa de Asturias de las Ciencias Sociales y como Jaime Siles, poeta y filólogo al que se le dedicó la entrada anterior, y como muchos otros hombres sabios.
Por desgracia vivimos en una sociedad muy materialista, en la que aquello que no se ve, que no puede comprarse o venderse, que no tiene una finalidad inmediata, no vale. Desde hace algunas décadas los que somos "de letras" tenemos que soportar la injusta etiqueta que neciamente se nos ha colocado. Seguramente los ignorantes que establecieron como dogma de fe el que las Humanidades son para incapaces, desconocen el significado del término.
No es esta entrada un alegato en contra de las ciencias teóricas y prácticas, a las que consideramos necesarias, útiles e imprescindibles, sino una defensa de la utilidad y la necesidad de los estudios humanísticos como contribución imprescindible a la cimentación de las sociedades modernas. La filosofía, el estudio de las lenguas, la historia, el arte, las ciencias humanas, sociales y del espíritu son pilares fundamentales de nuestra sociedad sobre los que ésta se sustenta. Sin humanidad no hay ser humano, no hay hombre, y entonces ¿para qué todo lo demás?
Felicidades, Luis, porque tú vales, y gracias, porque tu triunfo es un poco el triunfo de todos nosotros.
FUENTE: http://arsdocendi.blogspot.com.es/2016/06/los-de-humanidades-tambien-valen.html