Carlos López-Tapia / Paqui Ramos Madrid 24/09/2016 www.cadenaser.com

El latín clásico ha estado muy presente en el cine. Se le cataloga como una lengua muerta pero vamos a descubrir que está muy viva.

Cada sábado, a las siete de la tarde, por la Residencia de Estudiantes del Instituto Libre de Enseñanza en Madrid, se mueve un grupo de personas singulares en busca de un espacio donde reunirse. Se sienten en casa. Entre ellos puede haber empleados de banca, jubilados, maestros, catedráticos, filósofos o filólogos. La reunión es abierta y tanto cantidad como personas varían. Son el Circulus Matritensis. No son parte de la próxima novela de Dan Brown, pero cualquier visitante no avisado podría imaginarlo al escucharles y comprender alguna palabra sin llegar a entender apenas nada. Hablan, discuten, bromean…. ¡en latín! Quien no haya estado en este tipo de actos, no puede imaginarse con cuánta pasión y fluidez puede emplearse hoy en día el latín.

Les molesta que en Gladiator se diga cuádriga en vez de cuadriga, comprenden la necesidad que siente el legionario romano en la secuencia de La vida de Brian que recogemos en el audio, y desearían que los periodistas cuidemos más la pronunciación latina, de la que Javier y yo damos un ejemplo que preferiríamos olvidar.

Mientras Paqui Ramos nos lleva al centro de ese círculo, hablamos, en castellano, con dos de sus miembros en el estudio. Luisa y Alfonso enseñan nuestra lengua abuela en dos Institutos de la periferia madrileña. Los alumnos de Luisa la han visto aparecer este año saludándoles en latín… para continuar en latín hasta el final de la clase.

El pionero del movimiento llamado Latín vivant o Latinitas viva (Latín vivo) fue el jurista alemán Karl Heinrich Ulrichs. Este hombre, muy pobre y siempre perseguido, dedicó su vida a dos proyectos muy avanzados para su época: la despenalización de la homosexualidad, y llevar de nuevo el latín al rango de idioma de comunicación universal. Sus seguidores hoy son cientos, recogidos en círculos que se encuentran en todo el mundo, desde África hasta Estados Unidos, y que ven con simpatía el argumento expresado en la web más reconocida de temas clásicos, que considera poco menos que una estafa la formación universitaria que ofrece nuestro país en este aspecto.

Nuestros invitados subrayan el que nuestra ley educativa permita atravesar los años formativos sin recibir ni una clase de filosofía. Su queja se produce en una lengua, la nuestra, donde siete de cada diez palabras proceden del latín.

FUENTE: http://cadenaser.com/programa/2016/09/23/a_vivir_que_son_dos_dias/1474646258_173510.html