F. A. | Cádiz www.lavozdigital.es 21/05/2008
Platos de la época, bailarinas, visitas culturales y togas son los ingredientes de las cenas imperiales que se preparan para este verano por 45 euros.
La costumbre de llenar los bares y comerse lo que se ponga por delante no es nueva en Cádiz. Ya en el siglo I los gaditanos pudientes de la ciudad celebraban copiosos banquetes destinados a agradecer a los dioses su intercesión y, de paso, ponerse de morado y oro. Dos mil años después, una iniciativa de Monumentos Alavista ha apostado por rememorar aquellas noches en las que los patricios tiraban la casa por la ventana en unas noches de vino y bailarinas comentadas de un lado a otro del imperio como las más sonadas de toda Roma. A partir del 20 de junio los gaditanos del siglo XXI pueden apuntarse a una de estas bacanales -más castas esta vez- por 45 euros en la Casa del Obispo.
Claro, que no todo eran vicios en el imperio, sino también devoción. El gerente de Monumentos Alavista, Germán Garbarino, explica cómo los banquetes que se celebraban en la Casa del Obispo eran más píos. Según cuenta, el edificio fue en su día el askpeleion u hospital de Gades, con un templo dedicado a las tres divinidades de la medicina: Apolo, Asklepio e Higia. Cuando los pacientes llegaban para ser curados pasaban a una zona de incubación donde se les hacía dormir y los dioses les daban la solución a sus males.
Una vez curados llegaba la hora de ponerse a tono en un banquete que ofrecían a la divinidad que les había dado las claves de su salud. Esa es la historia que revivirán los comensales a partir de las nueve de la noche, cuando comience una visita guiada a la Casa del Obispo. Sus guías serán dos actores que harán el papel del nomenclator Lucio Moreno (esclavo jefe del Asklepeion) y de Diophines Fabio Veterano, un conocido doctor de Cádiz cuya lapida ha sido localizada en la necrópolis.
Mientras que unos visitan el yacimiento, otros se vestirán con las togas que facilita la organización, antes de que de comienzo el festin en un comedor al aire libre e iluminado por la luz de las antorchas. Los comensales se sentarán en triclinios y comerán al estilo romano: nada de cubiertos ni platos. Los alimentos -cuyas recetas han sido extraídas del recetario de Marcos Gavias Apicius- se servirán en grandes fuentes. Los gustatio o aperitivos consisten en pan romano (muy especiado y hecho de harina fina), aceitunas, almendras y dulcia domestica (dátiles rellenos). Más tarde, los esclavos del restaurante Catedral, encargado de la cocina, servirán tortillita de frutos del mar, mejillones, sepia asada, ensalada, sardina en salsa, atún en manteca, caballa a la mar condimentada con el famoso garum que hizo famosa a Gades en el imperio y ova sfongia ex lacte (crepes con leche). El plato fuerte o caputcenae consistirá en pollo numídico, cocinado con almendras y miel. De postre, habrá patina de frutas y, para regarlo todo, vino de rosas, tinto y mulsum (vino mielado caliente).
Rigor histórico
Durante toda la velada que terminará sobre la medianoche se celebrarán espectáculos -bajo el guión de María Teresa López de La Orden, conservadora del Museo de Cádiz- en el que actuarán las Puellae Gaditanae (Asociación Flamenca Carmen Guerrero), se bailará en honor a los dioses y se recordarán a las Bailarinas de Ojos Negros que venían desde Egipto a las celebraciones más pomposas. El precio será de 45 euros y las cenas tendrán lugar los viernes y sábados desde el 20 de junio hasta el 6 de septiembre.
LA CENA
Lugar: patio de la Casa del Obispo.
Fechas: desde el 20 de junio al 6 de septiembre.
Precio: 45 euros por persona.
Menú: Pan romano, dulcia doméstica, tortillita de frutos del mar, mejillones, sepia asada, ensalada, sardina en salsa, atún en manteca, caballa a la mar, ova sfongia ex lacte, pollo numídico, patina de frutas, vino de rosas, mulsum.