Rosana Torres www.elpais.com 05/04/2011
El Festival de Mérida da a conocer su inteligente programación en torno a la mujer, la guerra, la historia de los muertos y el teatro como elemento purificador.
Es uno de los festivales dedicados al teatro grecolatino más importantes que hay en Europa. El Festival de Mérida (finalmente parece que adoptará este clarificador nombre) ya ha dado a conocer la programación de su 57 edición, que se desarrollará del 7 de julio al 28 de agosto, con varias novedades.
Una de las más importantes es que será la primera vez en la historia del Festival que va a estar dirigido por mujeres, a pesar de que fuera una mujer, Margarita Xirgu, quien lo pusiera en marcha en 1933 con el estreno de una inolvidable Medea, adaptada por Miguel de Unamuno, quien asistió al estreno de la misma junto a Manuel Azaña, presidente de la II República. Pero esa feminización de la muestra no atañe sólo a la dirección del propio festival, en el que se estrena como directora Blanca Portillo, que comparte responsabilidades de programación con la productora, y directora adjunta de la muestra, Chusa Martín. El certamen va a ser plenamente femenino, con Antígona, la mujer en estado puro, como protagonista, y con numerosas creadoras al frente de varios de los proyectos de esta 57 edición. Lo más atractivo de esta clara apuesta por la producción propia es que, sin renunciar a figurones del teatro se ha buscado, y se ha encontrado, una filosofía y casi una ideología (en el buen sentido del término) en la que sustentar una muestra que casi dura dos meses, sin limitarse a lo que hacen tantos festivales: levantar el teléfono y ver quién está libre en esas fechas. Aquí primero se ha decidido qué se quería hacer y sobre todo por qué. Una vez se tenía la base y los mimbres se han buscado a los mejores y más adecuados tejedores para cada uno de los cestos.
«Hemos buscado y deseado un festival genuinamente femenino», señala Blanca Portillo, «dedicado a la mujer, al sentir femenino por encima del mundo apolíneo del hombre, por encima de eso que tanto defienden ellos como es el mundo de la razón y de la lógica, y hemos elegido a Antígona como clara representante de todos los valores de lo femenino, que no de lo feminista, y a través de ella también queremos hablar de la historia de los muertos, de esa historia que nunca se cuenta , la historia de los vencidos y al mismo tiempo que buscamos la autoridad de los autores clásicos, con la Antígona, de Sófocles , tendremos también la presencia de otras dramaturgias, y el legado de Antígona lo encontraremos en otras antígonas, que al igual que la de Sófocles, nos hablan más directamente del hoy y del aquí».
La mujer, la guerra, la historia de los muertos y el valor del teatro como elemento purificador se conciben como eje fundamental del Festival, y todos los espectáculos girarán en torno a esos elementos. Especialmente tres visiones en formatos y tiempos distintos de Antígona.
Antígona de Mérida inaugura el festival (8 al 17 de julio). La directora Helena Pimenta dirige este texto original de Miguel Murillo, ambientado en la Guerra Civil Española, que pretende rendir un homenaje a la ciudad de Mérida y que ya se sabe que cuenta con la actriz y cantante Bebe y Helio Pedregal como protagonistas. Antígona del siglo XXI, obra que aporta una visión atemporal de la tragedia (del 20 al 31 de julio), que dirigirá Emilio del Valle, quien se ha responsabilizado de la dramaturgia con Isidro Timón y que cuenta con los actores Anna Allen y Chete Lera que darán vida a Creonte y a Antígona. La más ceñida al texto grecolatino de Sófocles será la Antígona (del 11 al 28 de agosto) que con la versión de Ernesto Caballero dirige el mexicano Mauricio García Lozano, uno de los hombres más interesantes del teatro contemporáneo y aún desconocido en España, para nuestra desgracia, pero del que Blanca Portillo quedó abducida tras ver uno de sus espectáculos y al que ha fichado con la esperanza de que le de «sangre, alma, cuerpo y cenizas» a Antígona. Por su parte García Lozano dice que «como bien lo explica Steiner, en la Antígona de Sófocles se sintetizan los cinco conflictos estructurales de la raza humana. Quizás por eso, o quizá por algo más intangible, mucho menos explicable, leo este texto como una experiencia espiritual», señala el director.
La programación se completa con El Viaje de las heroidas, un espectáculo de danza-teatro de Karlik, dirigido por Cristina Silveira; La Asamblea de las Mujeres, de Aristófanes, un montaje al frente del cual están dos solventes nombres del teatro español contemporáneo como son José Ramón Fernández, responsable de la versión y la directora Laila Ripoll, y los monólogos Mano a mano, con directores y actores de prestigio. Además está confirmada la presencia de otros actores como Adriana Ozores, Ginés García Millán, Pepe Viyuela, Alberto Amarilla y Esteban G. Ballesteros.
También como novedad de la muestra está el hecho de que no sólo se utilizará el Teatro Romano como espacio escénico, también se verán espectáculos y otras actividades en el Anfiteatro, la Alcazaba, el Foro, la cripta del Museo Nacional de Arte Romano, el Templo de Diana y el Mercado de Calatrava. Espacios todos en los que se desarrollarán otras propuestas como microconciertos, con la mujer como temática central, montajes para toda la familia, la bellísima exposición fotográfica Camerinos con instantáneas de gran formado de Sergio Parra que se exhibirán en diferentes espacios de la ciudad, sin olvidar que los espectadores podrán ver de cerca a los protagonistas de la muestra en en los Encuentros con el público, una cita en días posteriores a los estrenos que se celebrará en la cripta del impresionante Museo Nacional de Arte Romano, construido por Moneo. El Festival dará comienzo el 7 de julio con una ceremonia inaugural en el Anfiteatro Romano, que contará con un concierto de 20 guitarras eléctricas interpretando música clásica.
Para más información www.festivaldemerida.es
ENLACES:
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